Soberón se consagra en La Romareda

Soberón vive un gran momento; quizá el mejor de su carrera tras fichar este verano por uno de los históricos del fútbol español y con un póquer de tantos en otras tantas jornadas que le han convertido en jugador de moda, como la 'L' que dibuja con sus manos tras marcar, un pequeño homenaje a Lorena, su pareja. Pero el de Unquera tuvo que recorrer antes un largo y difícil camino y dejar un Racing, el de Chuti Molina, en el que los canteranos no tenían lugar.

El cántabro marca ahora de dos en dos en el comienzo de Liga. Se estrenó como zaragocista con doblete ante el Cádiz, cuando su concurso fue fundamental en la victoria maña. Tantos en los minutos 14 y 43 que encarrilaron antes del descanso una goleada local que después redondearon Aketxe y Luna cerca del final del partido. Dos partidos en los que conservó la titularidad. Estuvo sin marcar, aunque sustituido al descanso en la tercera jornada, frente al Mirandés en Anduva. Pero el fin de semana pasado se anotó otro doblete que le sirvió para cazar a Andrés en la clasificación de goleadores de plata. El 3-0 zaragocista al Elche se fraguó de nuevo con goles del cántabro, que una vez más fue quien abrió el marcador para que Francho consiguiera el tercero ya cuando el partido se acercaba al final y la victoria estaba de nuevo encarrilada.

Mario Soberón Gutiérrez (Unquera, 15 de mayo de 1997) se ha convertido así en el 'nueve' de referencia de un Real Zaragoza que busca el ascenso o, al menos y desde una perspectiva más realista, el play off en una apuesta por un futbolista que llegó este verano libre sin que el Racing, que manejaba otras preferencias para la vanguardia y tenía con Arana cubierta la titularidad, pujara especialmente.

Antes se había convertido en forzado trotamundos del fútbol modesto. Formado en el Rayo Cantabria, Iván Ania le hizo debutar con el Racing en Segunda B en una temporada que terminó en ascenso, pero en el mercado de invierno salió cedido al Amorebieta, también en la categoría de plata, con el que marcó siete tantos en 18 partidos.

No fue suficiente para que Molina le incluyera en el nuevo proyecto en Segunda División. Al contrario, se le rescindió el contrato y pasó por los filiales del Valladolid y el Levante, aún en la extinta Segunda B, antes de recalar en 2021 en la recién creada Primera RFEF en las filas de la SD Logroñés. (34 partidos y nueve goles). Un ascenso con el Eldense (34 partidos y once tantos) le abrieron las puertas de Segunda, donde marcó nueve goles con los valencianos antes de quedar libre. Fue entonces cuando el Zaragoza se fijó en él y comenzó una nueva historia. Pero lejos de El Sardinero. Herencias de un pasado peor.