La Gimnástica se complica la vida en Oviedo

Es asumible y se puede lograr, pero es complicada por varios motivos. Uno de ellos es el buen inicio liguero del conjunto local, un Oviedo B en racha que ocupa la quinta posición de la tabla con 12 puntos, fruto de sus tres victorias, tres empates y una sola derrota, que se produjo en la primera jornada, en la visita de los carbayones al campo del Barakaldo (2-1). Desde entonces, el Vetusta ha enlazado seis encuentros sin perder, ganándole en casa al Athletic B y fuera al Sporting B y Tudelano; y empatando en El Requexón con Langreo y Calahorra y a domicilio al Real Unión.

Otro de los motivos es su fortaleza en casa, donde el conjunto que dirige Javier Rozada todavía no ha perdido. Pese a que dos de sus rivales (Langreo y Calahorra) lograron arrancarle un punto, no es sencillo jugarle a los ovetenses en su estadio, donde se encuentran a gusto y saben sacarle partido a un campo amplio en el que pueden desarrollar el juego que les gusta, rápido, de pases en corto y tratando de aprovechar la gran movilidad de sus interiores y delanteros.

Y en tercer lugar, el otro aspecto a tener en cuenta del Oviedo Vetusta es su facilidad para hacer gol. Los asturianos han marcado en todos los partidos que han disputado, algo que solo ha logrado el Racing y el Mirandés en el Grupo II, el Sanse en el Grupo I y el Baleares y el Villarreal B en el Grupo III, y dos equipos de Primera, el Barcelona y el Celta. Así, en las siete primeras jornadas han hecho trece tantos, una cifra que sitúa su capacidad anotadora casi en dos goles por partido.

Esta facilidad para ver puerta tiene su contrapartida. El filial ovetense también encaja con facilidad y no ha logrado mantener su portería a cero en ninguna de las jornadas precedentes. Ha recibido además diez goles, uno más que la Gimnástica, y en El Requexón han marcado todos los rivales que lo han visitado (dos goles logró el Langreo, uno el Calahorra y otro el Athletic B). Se trata de un aspecto que deberían tener en cuenta los torrelaveguenses, quienes en sus tres partidos a domicilio han conseguido hacer gol -un tanto en el Stadium Gal (1-1), otro en Tudela (2-1), y otro más en Leioa (2-1)-, aunque bien es cierto que también han encajado en todos ellos.

La Gimnástica llega al partido en un buen momento después de haber logrado el primer triunfo de la temporada. La victoria de la semana pasada en El Malecón ha devuelto la calma a un equipo que, tras seis jornadas sin ganar y cuatro derrotas consecutivas, empezaba a inquietarse y a llenársele de sombras la cabeza. Los tres puntos no le han impulsado en la tabla (ocupa el puesto 18º con cinco puntos), pero le han servido para quitarse un considerable peso psicológico de encima. Ha sido como un punto de inflexión en el que apoyarse para tomar impulso en la clasificación. Algo así como un nuevo comienzo, una oportunidad para hacer las cosas mejor.

La ausencia por sanción de Rubén Palazuelos, que también se perderá este partido, le abrió a Pablo Lago la opción de probar otras soluciones en defensa y en la medular. El asturiano optó por sacar a Luis Alberto del centro de la defensa y situarlo en el eje del mediocampo junto a Cusi, dejando el eje de la zaga para Cristian y Bardanca, quienes jugaron juntos por primera vez en la temporada. La presencia de Lucho en el centro le dio equilibrio defensivo al juego del equipo. Esta temporada había jugado todos los partidos en defensa, donde es un fijo en las alineaciones, pero ya tenía experiencia en la media y por tanto no se trataba de un experimento de riesgo. Sean cuales fueren los motivos que llevaron a Lago a tomar la decisión de preferir a Luis Alberto sobre Víctor o Alberto, lo cierto es que su apuesta salió bien, porque el juego defensivo mejoró, el equipo no concedió huecos y apenas cometió errores.

El técnico gimnástico podría aprovechar de nuevo la ausencia de Palazuelos para volver a alinear a Luis Alberto de mediocentro. Si eso se produjese, el once podría estar formado por Álex Ruiz bajo palos; en defensa Camus por la derecha -Fer jugó ahí frente al Gernika pero está lesionado-, probablemente Fermín por la izquierda, con Cristian y Bardanca de centrales; en la línea media, Cusi y Luis Alberto se encargarían de la creación, con Vitienes en la derecha y tal vez Diego Rozas por la izquierda (la banda izquierda ofrece otras variables, con Docal y Fermín, que pueden jugar tanto de laterales como de interiores); y arriba dos delanteros, probablemente Nacho Rodríguez y Primo, que desarrollaron en el partido anterior un buen papel en ataque y defensa. Aparte de Rubén Palazuelos y Fer, se han quedado fuera de la lista de convocados Adrián Peón y Dani Salas, que siguen recuperándose.