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A. FALAGAN | J. COMPOSTIZO
Jueves, 21 de febrero 2019, 07:53
La Gimnástica aún no ha cobrado sus derechos audiovisuales. Claro que tampoco ha generado facturas tras el acuerdo que alcanzó verbalmente con Footers ... a principio de temporada. Y es que dado el embargo sobre el club por la deuda con Hacienda, la sociedad ha dilatado algunos cobros -algunas facturaciones- hasta que reciba el crédito que le permita ponerse al día con la Agencia Tributaria -no se descarta que esta misma semana-. Los blanquiazules siguen así la misma estrategia que utilizaba el Racing hasta que la entrada del Grupo Pitma como accionista mayoritario.
«Hasta que no tengamos el certificado de Hacienda y de la Seguridad Social no podemos cobrar absolutamente nada», explica el presidente de la Gimnástica, Tomás Bustamante, que apunta a un plazo máximo de diez días. «Espero que para entonces tengamos las facturas, y en el momento que estemos al día con las dos administraciones cobraremos todo: las subvenciones que nos corresponden y los derechos televisivos», explica. Una entrada de capital que aliviaría la estrangulada tesorería gimnástica y daría al fin una buena noticia a un Bustamante cuyo compromiso personal ha resultado clave para mantener la normalidad institucional en el club.
De todos modos, el máximo mandatario gimnástico tampoco se muestra muy esperanzado en lo que a los derechos televisivos respecta. «No sé si cobraremos o no cobraremos», adelanta el dirigente, consciente de que existen «problemas». «Desde otros clubes me han asegurado que están pagando mal y tarde, pero yo no puedo confirmar nada», admite. Además, otra de las claves es la situación contractual de la Gimnástica y Footers.
«No puedo decir que sea totalmente cierto, porque nosotros aún no le hemos pasado la factura a la plataforma». La única referencia que tiene el mandatario blanquiazul sobre esa situación es, según sus propias palabras, «lo que me han dicho otros clubes, que con ellos están incumpliendo pero no puedo certificarlo».
Otro de los problemas a los que deben hacer frente los gimnásticos es la propia burocracia que rodea a su deuda. «La Administración, que va muy lenta para arreglar estos problemas», se lamenta el presidente, que destaca que al final son «los jugadores también los que sufren las consecuencias porque no pueden recibir sus honorarios».
Para calibrar el estado de salud de la entidad y el esfuerzo a realizar para superar los embargos de la Agencia Tributaria y Hacienda conviene recordar algunos datos. En la actualidad la Gimnástica adeuda más de 767.000 euros, según la auditoria realizada el 30 de junio de 2018. Es decir, que el equipo de Bustamante ha rebajado considerablemente el pasivo de la sociedad, que llegó a superar ampliamente el millón de euros.
Esta deuda procede de los créditos bancarios (170.000 euros) de deudas con Hacienda (180.000 euros), con la Seguridad Social (35.000 euros), con proveedores (27.220 euros), con acreedores (202.754 euros) y derivados de los procesos judiciales (152.000 euros).
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