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Dos partidos, dos victorias. La Gimnástica cumplió el pronóstico y derrotó al Vimenor en un partido que controló completamente y que decantó de su ... lado pronto, tras el primer gol mediada la primera parte. Buen partido en general de todos los futbolistas blanquiazules, con mención especial para Roberto y Dani Salas, y sobre todo Álvaro Prada, que cuajó un partido casi redondo, desequilibrante desde su parcela por detrás del punta, y que además marcó su segundo tanto en la Liga.
A pesar de que el oponente no generó apenas ocasiones de peligro, más allá de un par de contragolpes en los primeros minutos del segundo tiempo, y no representó una amenaza en ningún momento, el equipo de Alfonso del Barrio demostró que va a ser, como siempre, uno de los oponentes más difíciles de superar, sobre todo cuando juegue en casa. Con un plantel en el que despuntan jugadores con experiencia y calidad, no cabe duda que los blanquiazules serán, como siempre que militan en Tercera, serios candidatos no solo a disputar la fase de ascenso, sino a llevarse el campeonato.
Gimnástica
Peón, Fer, Fermín, Camus, Luis Alberto, Cusi, Vitienes, Roberto, Salas (Casta), Prada y Emilio (Ito)
2
-
0
Vimenor
Marcos, Rionda, Pablo, Rubén, Javi, Chus (Rubio), Berto (De Cos), Dosal, Quique (Jacobo), Mantilla y Óscar Merino.
Goles 1-0 m. 22 Dosal (p.p.); 2-0 m. 53 Prada
Árbitro Zubillaga Serrano. Mostró amarilla por el lado local a Camus
Incidencias El Malecón. 900 espectadores.
La Gimnástica fue de menos a más en la primera parte. Empezó dominando con tibieza a fuerza de juego combinativo gracias a la calidad de sus centrocampistas, pero tardó varios minutos en llegar con cierto peligro al área rival. Dani Salas, Emilio Herrera y Roberto protagonizaron las mejores jugadas antes del gol. El primero de ellos estuvo cerca de marcar a los cinco minutos, pero la jugada fue anulada por fuera de juego, y pasado el primer cuarto de hora sus dos compañeros tuvieron sus opciones desde lejos, pero en ambos casos el balón se marchó desviado.
El gol llegó producto de una acción a balón parado. El saque de esquina botado por Prada, algo suave y al primer palo, agarró desprevenidos a compañeros y rivales, y en una acción a medias entre Camus, que entró al remate, y Dosal, que trataba de despejar, este último introdujo el balón en su portería.
Marcar es lo que le hacía falta a la Gimnástica para apoderarse del partido, algo que hizo sin dudar y con cierta suficiencia. Tomó la posesión del balón y a fuerza de elaborar, llegaron un puñado de ocasiones más hasta el descanso. Salas, hasta en tres oportunidades, pudo hacer el segundo, al igual que Prada, que dispuso de un par de ocasiones para lograrlo, pero ninguno de los dos futbolistas, a pesar de su empeño y su facilidad para deshacerse de la defensa, acertaron en sus remates, que se fueron desviados. De no ser por esa falta de puntería, de hecho, la Gimnástica podría hacerse ido al descanso con un resultado menos ajustado.
El Vimenor salió con más empuje en la segunda mitad, pero tras el segundo gol, que marcó Prada tras recoger el rechace de un lanzamiento de Salas, se quedó sin opciones reales de remontar el resultado. Con más de media hora por delante, los de Vioño, a pesar de su entrega, no pudieron hacer otra cosa que aguantar un resultado que no fue más abultado gracias al buen hacer de su portero Marcos, que le sacó el balón a Prada en un uno contra uno.
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