La Gimnástica tira de solidez y pegada

A priori, el de ayer tenía que ser un enfrentamiento que demostrara el nivel y prestaciones de la plantilla blanquiazul que dirige Pablo Casar. Y así fue. Los gimnásticos arrancaban la Copa con un solo encuentro amistoso de pretemporada, frente al Laredo, y con la mentalidad de ganar, ya que no tenían otra alternativa si querían seguir vivos dentro de la lucha en una Copa a partido único.

El conjunto de la capital del Besaya empezó mandando en el choque. Un centro al interior del área pequeña a cargo de Héctor Tirado que Unai no acertó a rematar fue la oportunidad más clara de los primeros 15 minutos para los blanquiazules. Los de Cabezón de la Sal, que se daban cuenta del nivel que estaba imponiendo la Gimnástica y la comodidad con la que jugaban los torrelaveguenses, cambiaron el ritmo para hacerse ver en su territorio y llegar con peligro un par de veces seguidas a la portería de Rafa Pedrero, aunque sin éxito.

Alberto Delgado desperdició una pelota que le llegaba tras un pase de Somavilla, pero el remate del defensa se fue al lateral de la red. El partido se estabilizó y, excepto algunas llegadas tímidas y un discreto chut de Carlos Tobar que aterrizó muy lejos de la portería de Borja, ninguno de los dos equipos conseguía una clara posesión de la pelota. Hasta que una falta botada por Héctor Tirado, a falta de cinco minutos para la conclusión de la primera mitad, la cabeceó Oscar Marotías. Borja, con una gran intervención, repelió el remate. Pero tras rebotar el balón en el poste, Chamorro, solo en el segundo palo, lo envió al fondo de las mallas.

Tras el gol de la Gimnástica, el Textil Escudo se autoconvenció de que tenía que tirar con todo hacia el área blanquiazul. A base de pelotazos largos, buscaron a Cachu o Quimi… sin apenas éxito. Ahí aparecían siempre Fer o Chamorro para restar el acoso de los de Abraham Pérez. Fueron 45 minutos en los que la Gimnástica se mostró firme, convencida de sus fuerzas, además de verse favorecida por el gol.

Y si bien acabó el duelo para la Gimnástica en la primera parte, mucho mejor empezó en la segunda. Héctor Tirado, con un preciso lanzamiento desde el borde del área, marcó el 2-0. Y en el minuto 66 Altadill, que apenas llevaba unos instantes en el terreno de juego, anotó el tercero para los de Pablo Casar. Ahí, el partido quedó ya sentenciado. El Textil Escudo precisaba de una reacción monumental de la que, con anterioridad al tercer gol blanquiazul, no daba indicios de ser capaz de ejecutar.

La Gimnástica, por su parte, se dedicó a dejar pasar los últimos minutos del enfrentamiento, hacer tiempo y moderar el ritmo de juego de un partido que mereció ganar desde los primeros minutos, con un nivel de juego muy superior al de su rival. Los torrelaveguenses se medirán al Cartes en una de las semifinales de esta Copa Federación. Los dos encuentros de semifinales se disputarán el próximo fin de semana, uno el sábado y otro el domingo. Ambos serán a las 19.00 horas, en El Malecón.