Betanzos y Botín vuelven al agua

Tras disputar sólo dos regatas en la jornada inaugural del pasado viernes, el sábado los 49er y los FX regatearon con normalidad y recuperaron la prueba atrasada del primer día. Y el FX con el ESP 23 en su vela comenzó fuerte la jornada, con un viento medio de componente sur. Berta y Tamara anotaron un tercer puesto en la primera manga, tras las brasileñas Grael y Kunze y las danesas Hansen y Salskov-Iversen, las líderes de la competición. Pero el puñetazo en la mesa de las vigentes campeonas del mundo llegó en la segunda regata del día.

Berta y Tamara anotaban su primer 1 en el torneo olímpico para demostrar que son una de las tripulaciones a batir en Río. La tercera prueba del día no se les dio tan bien y en ella marcaron un undécimo puesto. En la cuarta, volvieron a estar entre las mejores, con una quinta plaza. Con el descarte ya en juego las españolas anulan el decimotercer puesto de la segunda regata de los Juegos, Betanzos y Echegoyen totalizan 24 puntos, a tan sólo cinco de la medalla de plata por la que están empatadas las brasileñas Grael y Kunze y las neozelandesas Maloney y Meech. Las danesas son líderes, con 12 puntos.

Botín, séptimo

Tampoco le fueron nada mal las cosas al dúo compuesto por Diego Botín y el gallego Iago López. Si el viernes se situaban en el top ten con una novena plaza, ayer mejoraron esa posición. En la primera regata del día, saltaba la sorpresa, ya que los intocables Burling y Tuke no ganaban la regata. Eran los alemanes Heil y Ploessel los que se imponían, seguidos de los vigentes campeones olímpicos, los australianos Outerridge y Jensen. Y el podio de esa regata lo cerraban Diego y Iago. Ese buen resultado se vio empañado por el decimotercero de la segunda prueba del día, pero los españoles regresaron a la senda de la regularidad, con un séptimo y un décimo puesto en las dos mangas que restaban.

Así, Botín y López son séptimos en la clasificación con 38 puntos descartan un 16 de su primera regata olímpica, a cinco puntos de la medalla de bronce que ahora ostentan los daneses Warrer y Lübeck. Los que pincharon, para alegría de toda la flota, fueron los neozelandeses. Tras sus dos 1 del viernes, ayer una serie de 5-2-8-6 les permite seguir en cabeza, pero con solo tres puntos de ventaja sobre Heil y Ploessel.

Echávarri se despide de Río

Tras las dos primeras jornadas disputadas, Fernando Echávarri ya sabía que en estos Juegos no iba a poder repetir la medalla que ganó Pekín, en la clase Tornado. No le salieron las cosas bien al tándem mixto del Nacra 17, por lo que el objetivo que se marcaron Echávarri y Tara Pacheco entonces fue meterse en el top ten, para poder disputar el martes la medal race, y así luchar por un diploma olímpico. Pero tampoco pudo ser y este domingo el regatista santanderino y su tripulante decían adiós a los Juegos de Río de Janeiro. Este domingo, el cántabro y la canaria entraron al agua en el puesto 13º y hicieron tres buenas regatas, en las que estuvieron con los mejores. Consiguieron un 4º puesto, un 13º y un 6º, lo que les valió para subir dos posiciones, hasta la undécima plaza, pero ahí se quedaron, a las puertas de clasificarse para la medal race, en la que solo entran los 10 primeros.

Bea Pérez (hockey) juega ante Gran Bretaña

La jugadora de hockey Bea Pérez jugará este lunes (18.00 horas) los cuartos de final del torneo de hockey femenino, después de que la selección española se clasificase, "in extremis" tras derrotar a Corea y aprovechar el triunfo de Nueva Zelanda ante China. Al conjunto que dirige Adrian Lock le espera Gran Bretaña este lunes por la tarde, un rival complicado, pero con el que España puede tener alguna opción de llegar a las semifinales.

Mario Fernández no debutó

Por su parte, Mario Fernández, que no ha tenido la oportunidad de debutar en estos Juegos Olímpicos (estaba como portero reserva y no ha podido jugar ni un minuto), veía este domingo como su la selección de hockey se despedía de Río con una amarga derrota en los cuartos de final ante Argentina.

La despedida de España en los cuartos de final del torneo no pudo ser más cruel. Cuando el partido ante Argentina se encaminaba a los penaltis, un discutido stroke a falta de un minuto y medio para el final, que no debió ser señalado, según insistieron los jugadores del equipo nacional, rompió las ilusiones de España, que después de una gran primera fase cayó en el cruce decisivo (1-2) de la forma más dolorosa.

España se quedó fuera de la lucha por las medallas con una tremenda sensación de rabia, impotencia y desilusión. El trabajo de cuatro años y su magnífico rendimiento en Río, con victoria incluida ante la número uno del mundo, Australia, quedaron sepultados frente a Argentina por un penalti stroke a última hora. «Esto lo más injusto del mundo. Dos errores en 60 minutos nos han costado la victoria. Me duele mucho por los jugadores después de haber hecho un grandísimo partido y de un toreo increíble», reconoció el seleccionador español, el francés Fred Soyed, que esperaba a ver la repetición del stroke en vídeo y en caliente no quiso entrar en valoraciones arbitrales. «Si no ha sido stroke, duele aún mucho más, pero es una decisión del juego cuya interpretación de los árbitros puede ser distinta», apuntó el técnico de España, que prefirió destacar que la eliminatoria se decidió «por detalles».