23 años de balonmano

La tradición dice que es un torneo grande, y en esta, su edición XXIII, efectivamente fue más grande que nunca. Cerca de 500 pequeñas promesas del balonmano cántabro, asturiano, castellano leonés y vasco se desplazaron el domingo hasta la capital del Besaya para competir en el Torneo de Navidad Solidario Ayuntamiento de Torrelavega. Una iniciativa que sirvió el pasado fin de semana para congregar a los más pequeños en torno a este deporte y también para completar ese fin solidario por el que se llegó a recoger una furgoneta llena de alimentos que fueron donados a la Cruz Roja.

«Un año más lo hemos vuelto a conseguir. Y estamos contentos no solo por lo importante de un evento que reúne cada año a más jóvenes deportistas, sino porque su fin solidario, y más en estos tiempos, es lo más importante», concretó Diego Soto, coordinador de la Escuela Municipal de Balonmano y organizador del torneo. Por eso los resultados fueron lo menos importante. Aún con todo el Club Balonmano Torrelavega pudo celebrar varias victorias. «Ganamos con los infantiles, tanto masculinos como femeninos, en ambos casos contra el Balonmano Gijón. Tenemos esos dos títulos de campeones y estamos muy orgullosos de los nuestros», explicó el organizador del evento que atrajo a Cantabria a cientos de familias para contemplar los partidos que se celebraron en tres pabellones: Río Viar, Enrique Pérez Pachín y Vicente Trueba. Fueron en total 48 encuentros de 25 minutos cada uno.

Esfuerzo organizativo

«Trabajar con casi 500 niños durante una sola jornada es una complicación a nivel logístico que un año más hemos vuelto a solucionar», destacó Alejandro Gómez, gerente del Club Balonmano Torrelavega. «Aquí lo más importante es el fin solidario. Nosotros siempre buscamos mostrar nuestros valores a los niños de la Escuela».

La Cruz Roja distribuirá todos los alimentos recogidos: «Nosotros somos una institución que se nutre de la colaboración ciudadana», dijo María Eugenia Bouzas. La presidenta de Cruz Roja Torrelavega agradeció a los organizadores su implicación en la causa y destacó la importancia de trasladar este pensamiento a los más jóvenes. «En sus manos está el futuro y esperamos que hagan un mundo mejor para todos», agregó Bouzas sobre los niños repartidos en 8 equipos benjamines, 15 alevines y 10 infantiles.

Además, a la recogida de alimentos se sumó la de juguetes, que organizada por Cruz Roja Torrelavega busca que ningún niño se quede sin regalo en esta Navidad. Las donaciones se canjearon por entradas para presenciar el partido del primer equipo del Balonmano Torrelavega, que le enfrentó al BM Soria el sábado en el Vicente Trueba. Los locales se llevaron la victoria.

Una cita más grande

«Lo que más nos gustaría sería hacer crecer este torneo, pero ya somos conscientes de que es muy complicado, sobre todo porque haría falta más infraestructura, más personas trabajando en la organización, y eso es dinero», explicó Soto. «Tengo que dar las gracias a todos los patrocinadores que han hecho posible que hayamos llegado a la XXIII edición y que año tras año vayamos consolidando aún más un evento que sirve para alimentar la ilusión de los más pequeños por este deporte».

Para completar la celebración, se disputó un partido que enfrentó a la selección cántabra infantil ante los cadetes del Balonmano Torrelavega. Cayeron los cadetes «pero ha servido para que ambos mejoren su preparación de cara a las siguientes competiciones, sobre todo las nacionales».