La asamblea de la Cántabra rechaza la promoción de descenso en la Apebol

Los encargados de dirigir la reunión tuvieron que lidiar con los avatares propios del formato telemático de la cita, la segunda que tiene que celebrarse de esta manera. Una novedad que todavía está en proceso de implantación y que obligó a retrasar el inicio del orden del día, que además de las propuestas de los grupos de trabajo incluía la presentación de las cuentas federativas, tanto las del pasado año como las presupuestadas para la temporada actual.

Uno de los puntos clave de la reunión era el del calendario deportivo de la temporada 2021, el que fijaba las fechas no solo de los torneos por equipos sino también de los campeonatos regionales de las diferentes modalidades. El título de Cantabria de Primera Categoría se pondrá en juego los días 16 y 17 de julio, por lo que el torneo recupera la fecha lejana al Campeonato de España. Tres semanas antes será el turno del Regional de parejas, que se disputará el 25 y 26 de junio. El Regional femenino se celebrará el 1 de agosto, mientras que regresa a la programación el entorchado de los más pequeños, el benjamín, que los niños dirimirán el 7 de agosto. Los más madrugadores, como siempre, serán los jugadores de pasabolo tablón, que jugarán su Regional de Primera el 13 de junio. El 22 de agosto tendrá lugar el torneo de pasabolo losa y un mes más tarde, el 19 de septiembre, el de bolo pasiego.

A nivel colectivo, una de las fechas marcadas en rojo en el calendario es la tarde de las finales coperas, tanto la de la Copa Presidente como de la Copa Cantabria femenina. La cita está prevista para el martes 3 de agosto. Camargo y Peñacastillo jugarán la Supercopa en Cerrazo el 26 de mayo y el 8 de agosto será el turno de la Copa de Veteranos. En las otras modalidades, el Torneo Presidente de tablón tendrá su fase final el 1 de mayo, el 15 de agosto se jugará la Copa de bolo pasiego y el 19 de septiembre se decidirá el título en pasabolo losa.

Otro de los puntos importantes era el debate acerca de la propuesta de Apebol de que fueran tres los equipos que bajen directamente y un cuarto el que promocione ante el segundo clasificado de Primera. La asamblea rechazó esa propuesta y decidió que fueran cuatro las peñas que pierdan la categoría de manera directa. Con su voto el cónclave apretó todavía más la pelea por la permanencia en la Liga Rucecan y pocos serán los conjuntos que pasen un año tranquilo y sin tener que mirar hacia abajo.

Si los equipos de División de Honor y Primera no tendrán que afrontar una promoción a final de curso, sí lo harán, como cada curso, las peñas de Segunda Especial y Segunda de cara a completar las plazas de ascenso. Hasta ahora las mismas se jugaban a doble vuelta, pero la asamblea aprobó ayer que a partir de ahora se diriman al mejor de tres partidos que finalizarán cuando una de las partidas llegue a cuatro chicos. Una medida para dar impulso a las eliminatorias y evitar que con una boleada queden resueltas a las primeras de cambio.

Otro de los aspectos que suscitó debate entre los participantes fue el formato del circuito de Primera, que hasta ahora daba acceso al Regional de la temporada siguiente. El voto de calidad de Norberto Ortiz, tras el empate en la votación, decidió que sean los concursos del mismo curso los que clasifiquen para la cita regional, una medida que implica que solo serán puntuables los primeros torneos del año.