Un partido para ajustar cuentas

La fecha ya se escapará de la memoria de los aficionados verdes fue el 15 de noviembre pasado, pero el partido está grabado a fuego. Bathco-Alcobendas. El día en el que vieron a su equipo sufrir la derrota más surrealista que recuerdan. Aquel 26-34 dolió no solo porque fue ante un recién ascendido, sino sobre todo por el cómo. El Bathco ganaba por 16-0. Cerca de su propia portería, los verdes quisieron apabullar a los madrileños con su melé. El Alcobendas robó el balón y ensayó. Y a partir de ahí el Bathco se convirtió en una panda de monigotes sin criterio alguno. El día más extraño que, por suerte, ya está más que olvidado.

Pero el deporte da siempre la opción de ajustar cuentas. Este domingo (12.30 horas), el Bathco tiene la opción de devolver el golpe a los madrileños. Además, los dos equipos tienen dinámicas muy distintas. Los santanderinos llegan lanzados tras una segunda vuelta espectacular, mientras que al Alcobendas se le está haciendo la liga muy larga. Tras una primera vuelta de ensueño, de los últimos siete partidos han perdido seis. Los madrileños aún están en puesto de play off son sextos. Pero los nueve puntos que tienen de renta sobre un Barcelona en racha no parecen ya tantos.

Los verdes llegan al campo de Las Terrazas con dudas sobre todo en la primera línea. Varios de sus jugadores en esas posiciones están ya, a estas alturas de temporada, casi fundidos. Pepín Sanz y Matías Sánchez no serán de la partida, ya que están lesionados. Vázquez, Balbás y Hutchinson serán los titulares en esa primera línea aunque el inglés, que lleva un mes sin parar entre el Bathco y la selección, necesita un descanso.

Pero ahí se acaban las malas noticias. Con la excepción de Mauro Macchi, que sigue recuperándose de la lesión en un brazo, el Bathco jugará mañana con todo lo que tiene en Alcobendas. Agustín Schab recupera el puesto de 8 titular en detrimento de Andrés Baeck. En el resto del quince verde formará esa alineación que ya los aficionados de San Román empiezan a recitar de memoria. Todos con el objetivo de llevarse los cinco puntos en liza. Y de paso, ajustar una cuenta pendiente que hay desde ese 15 de noviembre.