Secciones
Servicios
Destacamos
Marco García Vidart
Sábado, 21 de mayo 2016, 21:06
La temporada para el Bathco llegó ayer a su fin. Y de una manera honrosa, pero un tanto cruel. Los verdes cayeron por 33-16 ante un Silverstorm El Salvador al que fueron doblegando por 3-16 al término de los primeros 40 minutos. ... Pero la reacción de los vigentes campeones de Copa no se hizo esperar y en la segunda parte maniataron a los cántabros, que no fueron capaces de anotar ni un solo punto. Así, Valladolid se asegura acoger la final el próximo fin de semana, sea quien sea el rival del Chami, Quesos o Cisneros.
El encuentro en un Pepe Rojo más desangelado de lo esperado en una semifinal de liga no empezó bien para el Bathco. No habían pasado ni dos minutos cuando Sam Katz disparaba hacia la portería verde el primer golpe de castigo. Era el 3-0. Por suerte, un molesto viento de través hacía que el apertura inglés de los chamizos no pasase el segundo tres minutos más tarde. «Capitán, tres faltas en siete minutos ¡Disciplina!», advertía la señora Alhambra Nievas al capitán verde Javier de Juan. Por entonces, el Bathco no había pasado del medio campo.
Pero poco a poco, El Salvador se fue diluyendo. A los diez minutos llegaba la primera melé y el Bathco ya avisó de por dónde iban a transcurrir el resto del choque. Sin el empuje del australiano Borsak, se intuía que El Salvador iba a sufrir lo indecible. Y así fue. Los santanderinos se agigantaban, tanto en defensa como en ataque, y ganaban metros hasta que en el minuto 16, Juan Diego Zabalegui pasaba un golpe de castigo para llevar la igualada a tres en el marcador del Pepe Rojo.
El Bathco estaba de lo más intenso, intentando jugar lo más rápido posible para no dar tiempo a que la casi perfecta defensa pucelana se ordenase. Además, en las melés los locales tenían un agujero negro. Nievas no paraba de advertir a las primeras líneas que empujaran a la vez. Y tras otra infracción en el agrupamiento por parte blanquinegra, otro golpe de castigo pasado por Zabalegui ponía al Bathco en ventaja, 3-6.
El escenario pintaba bien para el Bathco, que por intensidad doblegaba al gran favorito al título. Pero una tarjeta amarilla a Agustín Schab puso un poco de sombra en la gran primera parte verde. Aún así, el Bathco apretó en defensa para aguantar la superioridad numérica local en los últimos diez minutos de la primera parte. Y no solo lo hizo con éxito, sino que aumentó el resultado. A nueve del final, Zabalegui, con otro golpe de castigo, llevaba el 3-9 al marcador. Y en el último minuto de la primera mitad llegó la apoteósis. En la 22 cántabra, Katz falló un pase que cazó al vuelo Coronel, que se dirigió como una flecha hacia la zona de marca chamiza para ensayar. Con la transformación de Zabalegui, era el 3-16 al descanso.
Reacciona El Salvador
Los pucelanos salieron del vestuario con una marcha más para remontar un marcador muy peligroso. Y no tardaron ni un minuto en recortar diferencias. Katz, con un golpe de castigo, ponía el 6-16. Y con otra patada centrada, el apertura inglés ponía a su equipo a tiro de ensayo (9-16) en el minuto 50. La mala noticia para los santanderinos era que no habían pasado de medio campo. Cuatro minutos después, el 10 de los chamizos subía un 12-16 que hacía estremecerse al Bathco y solo un minuto después El Salvador culminaba la reacción. Una jugada con varias fases desembocaba en un ensayo de Alberto Díaz, que posaba el balón bajo los palos verdes. Katz transformaba para el 19-16.
En una semifinal a partido único al Bathco no le quedaba otra que arriesgarlo todo. Y los santanderinos se lanzaron al ataque como posesos. La melé ya era territorio cántabro, pero la ansiedad hacía perder balones que podían dar lugar a buenos ataques. A doce minutos del final, llegó la sentencia. John Carter agarró el oval y quebró a Mauro Macchi en la 22 cántabra, para enfilar la zona de ensayo y subir el 26-16 luego de la transformación de Katz.
El Bathco lo siguió intentando y en los últimos minutos se jugó en la 22 pucelana, sobre todo en melés que Nievas mandaba repetir una y otra vez. Zabalegui optó por disparar un golpe de castigo a la portería, pero el oval se encontró con uno de los palos. Ya en el tiempo de prolongación, una pérdida de balón del Bathco la aprovechó Zevango para conectar una patada a seguir, ensayar y con la transformación de Katz, terminar el partido con un 33-16 y con ello, la temporada para el Bathco.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.