«No creo que haya tenido al público en mi contra»

-Han pasado varios días desde su tercer título de España. ¿Cómo lo ve con perspectiva?

-Sigo muy contento; es un orgullo. Había pasado unos momentos de duda, sobre todo después del Campeonato de Cantabria, pero llegaba con confianza. Después de ir líder tras los dos primeros concursos pasó lo de cuartos, en los que con bolas quedas no pasé de 118, pero yo tenía confianza. En semifinales se me quedó otra por un error mío, pero de atrás lo pude arreglar.

-Fue un torneo de supervivencia, porque después de cuartos no dependía de sí mismo...

-Fueron los momentos más complicados. Yo tenía confianza en mí.

-Se quitó la espina de ganar el primer Nacional fuera de su casa, de Peñacastillo.

-Ganar en la Severino Prieto es un honor. Es una bolera histórica y no había ganado allí ningún gran campeonato.

-¿Ya ha posado para la vidriera?

-No, aún no, no me han avisado.

-¿Es muy diferente ganar en tu bolera a hacerlo fuera?

-Hay diferencias en cuanto a que en casa juegas y entrenas todo el año; conoces cada esquina y cada bote. Cuando juegas en otra tienes que hacerte a ella. Hay mecanismos diferentes.

-Entre la pancarta de Resines aludiendo al pueblo de Santander y alguno que silbó en la bolera se levantó algo de polémica...

-Lo de la pancarta son cosas de políticos, yo ahí no me meto. Torrelavega es un lugar donde siempre me he encontrado a gusto. En cuanto a los silbidos, creo que fueron cuatro que no representan al público asistente.

-¿Está preparado por si en algún momento tiene al público en contra en la bolera, algo que le ha pasado a casi todos los grandes campeones de todos los deportes?

-No creo que le haya pasado a todos los grandes campeones y no estoy de acuerdo en que yo tenga al público en mi contra. Y, si en algún momento lo tengo, no pasa nada, estoy preparado. Yo voy a jugar, a tirar bolos, muchos me aplaudirán y si alguno no quiere no tengo problema, me da igual.

-Uno de los comentarios de la Semana Bolística fue el estado de la bolera. ¿Tan complicada estaba?

-Sí tenía sus dificultades, pero a mí me gustaba. Tenía algunas zonas duras, alguna bola no entraba y si no amarrabas había que birlar en el tablón, pero a mí eso no me parece mal y estaba igual para todos. El último día estaba mejor, algo más blanda. Creo que habían echado algo de arena en el birle.

-¿Que Óscar quedase eliminado a las primeras de cambio le puso más nervioso o le relajó por quitarse un rival de encima?

-Me dio igual, Yo estaba concentrado en lo mío, no en los demás.

-¿Notó algo menos de gente que otras ocasiones en la grada de la Severino Prieto?

-Quizá durante la final del campeonato, sí. Normalmente ese día hay lleno y esta vez hubo algunos huecos. Quizá fue porque no hicimos muchos bolos, aunque al final fueron casi 700.

-En semifinales, con 540, parecía una cifra baja para lo que nos tiene acostumbrados...

-Al final hice 694 con varias quedas; un registro que muchos años hubiera supuesto la victoria.

-Es un referente del mundo bolístico y la figura más joven. ¿Hay que cambiar algo para enganchar a la juventud?

-Siempre se puede cambiar y mejorar algo, pero los grandes cambios siempre son complicados. Hay que seguir trabajando en la cantera, en las escuelas, en los colegios, invertir y fomentar el juego.

-¿Es asumible en la sociedad actual que una competición bolística dure seis horas?

-Para mí sí. Hay partidos de Grand Slam de tenis que duran eso y no pasa nada. Además, es solo un partido, mientras que en bolos son varios. Puedes entrar, salir, ver lo que te apetezca si no quieres estar seis horas. Hay hueco para todo tipo de gustos.

-En el Torneo de Campeones probaron a cronometrar el tiempo de tiradas. ¿Notó alguna diferencia?

-La verdad que ni me enteré, pero no creo que sea una solución a futuro. Un concurso puede tener muchos condicionantes. Hay árbitros más rápidos que otros, los pinches igual y no es lo mismo tirar cinco con una bola que tirar uno.

-Uno de sus santos y señas durante los concursos es su concentración mientras tira su rival. ¿En qué piensa?

-En nada en concreto, solo en la próxima tirada.

-A nivel de peña este año ha abierto y ha cerrado la partida. ¿En qué posición se siente más cómodo?

-Empecé a abrir hace cuatro años, cuando llegaron Rubén, Salmón e Iturbe, y este año me ha tocado cerrar en varias ocasiones. Es diferente. Para mí es más importante abrir porque puedes encarrilar la tirada, pero me siento cómodo en ambos lugares. No sabría elegir.

-Tras la Semana Bolística no llega el descanso. ¿Está el calendario demasiado cargado?

-Que tenga que jugar ahora todos los días es bueno, porque eso significa que me he metido en las fases finales, pero creo que se podría cargar algo más junio y julio y despejar el final de agosto y la primera semana de septiembre.