Eduard 'El Killer' sorprende por la vía del KO en Barcelona

La velada, organizada por la promotora de Sandor Martín, en el Hotel Alimara de la ciudad condal, fue un banco de pruebas para el talento joven nacional y un test para el astillerense que superó con una confianza que asombró a los presentes. «Tenía claro que iba a ganar por KO, pero no sabía que tan pronto», explica Ionut, que incluso él mismo acabó la pelea antes del tiempo esperado.

El pupilo de Rasilla debutó hace unas semanas en La Cantábrica en el campo profesional. Venció por KO técnico en el segundo asalto. Su récord de victorias en el campo amateur era su carta de presentación, pero las expectativas se han superado en las dos peleas que lleva en el escalón más alto. «Estoy hasta más cómodo en profesionales; el pesaje se hace el día antes y eso hace que no esté tan nervioso cuando subo al ring. En amateur era horas antes y no te daba tiempo a recuperar del todo», explica el boxeador, recién llegado de Barcelona donde dejó a los expertos con las cejas arqueadas ante la dureza de su pegada.

Se enfrentó a Eddy Ruiz (3-3-0), un púgil con experiencia, arrojo y que también estaba acostumbrado a acabar los combates antes de tiempo. Y con más de cien peleas en las artes marciales, fundamentalmente en el kickboxing. Eduard salió al ring de Barcelona decidido a «hacer el boxeo que me gusta». No escatimó nada y se hizo dueño del centro del cuadrilátero. Pegó fuerte y le asustó con una mano de derecha. «El rival quiso contraatacarle, pero se dio cuenta de que Eduard le hacía daño y cambió».

Primero fue un golpe a la cara y luego tres crochet a la cabeza con los que no pudo hacer nada. «No pudo aguantar la cuenta de diez y quedó fuera de combate», recuerda Rasilla. La victoria de Eduard le coloca en una situación inmejorable al joven nacido en Rumanía, pero que se vino para Cantabria con apenas tres años. Eddy Ruiz estaba ranqueado en el número cinco y Eduard en el catorce, por lo que el salto que dio este fin se semana tras noquear en el primer asalto a un púgil tan bien reputado ha sido importante. A sus apenas 19 años, Eduard se exhibió en un escaparate como la ciudad condal.

«Hice el boxeo que me gusta, combativo, al ataque y con fuerza. Ojalá sean así todos los combates», deseaba un Eduard que aprovechó la jornada de ayer para descansar. Admite que «sí han cambiado cosas de la forma de pelear en amateur y ahora», pero continúa con las mismas rutinas para seguir creciendo. «Ahora hay que seguir motivado, mantener la concentración y aprender», explica. Casi sin respiro, 'El Killer' volverá a subirse a la lona el próximo 18 de mayo en una velada donde también estará su compañera de gimnasio Mari Luz 'La Joyita' Peral y el también cántabro, Jesús Laso. Los rivales aún están por definir, pero el espectáculo tendrá una pelea estelar entre Rikar Urrutia (Bilbao) y Ricardo Fernández (La Rioja) catalogado como uno de los mejores nacional en el peso superligero. «Seguiremos la preparación para la siguiente pelea. No cambiaremos nada», señala Eduard.

El programa del joven boxeador no queda ahí, y en julio tendrá una nueva entrega. La fase de maduración del púgil va por buen camino y su adaptación al profesionalismo está marchando por buen camino. «Por el momento las peleas están siendo a cuatro asaltos y por eso el entrenamiento está controlado. A medida que vayan alargándose los combates habrá que ser más resistentes y trabajar fuerza, potencia para más tiempo», indica el joven talento del Gimnasio Rasilla.