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Si este miércoles fueron las peñas de División de Honor las que se reunieron para poner en común sus ideas de cara a la temporada venidera, este jueves tarde son las de Primera Categoría las que están citadas para definir las propuestas de cara a hacer más fácil el curso para todas. La cita está prevista en Quijano y la iniciativa parte de Renedo y Pámanes.
A caballo entre la División de Honor, en el que los compromisos económicos tienen un valor significativo y las categorías amateur, la Primera cuenta con división de opiniones en cuanto a las peñas que quieren completar la competición y otras que no lo ven tan claro. «Queremos saber lo que piensa cada peña a nivel individual, sacar conclusiones de sus circunstancias y ponerlo a nivel colectivo», señala Pedro Mazorra, presidente de Renedo. «Se trata de presentar el proyecto de cómo afrontar la temporada en la categoría», aclara.
Las opiniones están divididas casi a partes iguales en la Primera. Algunas peñas como Andros La Serna Valle de Iguña o Pontejos han manifestado su predisposición a saltar a la bolera, aunque otras tienen más dudas debido a las dificultades de un año en el que además de la salud se puede poner en riesgo la economía de las entidades.
En el caso particular de Renedo, a las dificultades derivadas de la crisis económica se une la falta de bolera. Pese a ello, la intención de la entidad dirigida por Mazorra es disputar la competición. «Como presidente diría que no, no tenemos ni bolera. Sin embargo, los jugadores me han dicho que quieren jugar, así que si siguen con la idea y encontramos bolera, saldríamos». Un esfuerzo por parte de directiva y plantilla, que disputaría la competición sin cobrar lo pactado antes de comenzar la temporada. «Les he comentado que tengo el dinero justo para ciertos gastos que faltan, como los árbitros y el pinche, y que no hay para nada más. A no ser que salga algo raro jugarían gratis y si sale algo más se repartiría, pero este año no voy a buscar dinero a las empresas tal y como está la situación».
A los problemas económicos, las peñas de Piélagos tienen que unir el hecho de que las boleras municipales están cerradas. «Ellos han cerrado todo lo que es deportivo, eso lo apoyo en este momento. Los recursos deben destinarse a otros asuntos».
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