Galicia y Asturias quieren llevarse la Vaca Gigante

«No hay viabilidad ni nadie se ha puesto en contactos para solucionarlo. Estamos muy agradecidos, proque cada uno aporta y hace lo que puede, pero los costes y requisitos ya son muchos y no hay recursos propios suficientes. Agradecemos el apoyo que tenemos, pero no es bastante. La prueba se ha sobredimensionado en costes; solo en el agua hay más de 50.0000 euros en equipos de rescate y medios. Y al ser Campeonato de España hay que cumplir más requisitos; todo se ha hecho demasiado grande», añade.

De hecho, la opción más sólida de continuidad de la cita, y no a corto plazo, es la de trasladarla. La Vaca Gigante es un nombre registrado que emigraría así fuera de Cantabria, como la organización, que seguiría corriendo a cargo de ObsessionA2, y su condición de Campeonato de España de olas gigantes, que ya estrenó en febrero de este mismo año, en una edición que evidenció ya los problemas logísticos y financieros de una prueba en riesgo de morir de éxito.

Y es que según fuentes de la propia organización aquella última edición costó aproximadamente 90.000 euros y calculan que una nueva rondaría los 100.000, frente a los 10.000 de la primera. Esas mismas fuentes apuntan a que se pueden generar unos 50.000 de beneficio, de modo que el resto debería cubrirse con una aportación institucional (Ayuntamiento de Santander y Gobierno de Cantabria) que en estos momentos no llega a los 30.000. Y todo ello a pesar de que los 15.000 euros que aporta el Instituto Municipal de Deportes es ya una fuerte inversión para la Casona.

No es la única dificultad económica para una prueba que arrastra también pagos pendientes de la anterior edición a los que aún no se ha hecho frente, como reconoce la propia organización. Alude en este caso al retraso en el cobro de las subvenciones comprometidas.

De hecho, las exigencias federativas al convertirse en Campeonato de España y la nueva Ley de Espectáculos también provocaron -en el segundo caso como a prácticamente todos los organizadores de eventos de Cantabria- serios problemas burocráticos y de seguridad a ObsessionA2 que también pusieron en riesgo la cita, y que de hecho la retrasaron durante meses pese a la buena disposición de Ayuntamiento y de Costas.

Así, la rueda de presa convocada para hoy oficializará la mala noticia; una suspensión temporal a la espera de una solución de urgencia, casi milagros, que amenaza con ser definitiva. Y con la única alternativa para los organizadores -que no para Cantabria, que perdería de todos modos el evento- de que pueda disputarse, siempre que fragüen las conversaciones y se encuentre un spot adecuado, fuera de los límites autonómicos. La propia organización admite el interés llegado de otras comunidades autónomas. No solo Asturias y Canarias (esta última es ya una propuesta sólida), sino también, en su momento, gallega.

«Ya desde hace dos años alguna comunidad autónoma se ha puesto en contacto. Canarias nos ha presentado dossier para llevar la prueba allí y al ver que estos días ha vuelto a surgir la problemática se han puesto de nuevo en contacto con nosotros, porque la Vaca es una marca, como el Dakar, que se trasladó a Sudamérica. A nosotros como santanderinos y cántabros nos gustaría celebrarla aquí, pero ahora, pese al apoyo público y privado que recibimos y agradecemos, no es posible.

También surferos asturianos con los que tenemos contacto nos han dicho que podrían encontrar inversores para trasladarla allí, porque no tienen ninguna prueba de este tipo. Incluso Galicia lo planteó hace pocos años, aunque ahora sí que cuentan con una prueba y van a poner en marcha otra en breve, así que lo tienen parado», reconoce García.

«Nuestra ilusión y orgullo es que se quede en Cantabria -continúa-. La consideramos una marca cántabra, pero al mismo tiempo queremos que no desaparezca. Estamos tocados anímicamente, porque han sido muchos años de mucho esfuerzo, pero ahora mismo seguir celebrándola sería hipotecarse nuestras vidas», lamenta.