Pedreña rinde un homenaje de alto nivel a la memoria de Ramón Sota

El campo de Pedreña acogió ayer una espectacular jornada de golf. Con jugadores de primer nivel y con algún amateur con rostro bien reconocible. Todo para homenajear a la persona de Ramón Sota. El participante más reseñable del torneo, Jon Rahm, lo vio claro: «He tenido la oportunidad de disputar una prueba muy especial, ya que en no muchas se recuerda de esta manera a una figura del golf como fue Ramón Sota».

La excelente climatología acompañó en Marina de Cudeyo cuando los equipos se lanzaron a por el triunfo. En total, 27 combinados participaron en el torneo, formados todos ellos por cinco miembros un profesional y cuatro amateurs. La victoria fue para el equipo liderado por el profesional, natural de Zarautz, Eduardo Larrañaga, participante en el Pro Challenge Tour.

El segundo puesto del podio quedó en casa y, además, también en la familia del propio Ramón Sota. Javier Ballesteros, hijo de Severiano, encabezó el equipo que se quedó más cerca del trofeo de campeón. La tercera plaza también tuvo acento cántabro, con Pablo Novo residente en Praga, que se encuentra de vacaciones en su tierra como representante profesional del tercer clasificado. Un podio más que destacado tras una competición de nivel.

El español Jon Rahm, pese a ser el gran favorito a nivel individual, no pudo entrar entre los primeros clasificados junto a su equipo. Pero dejó grandes golpes para los numerosos aficionados que siguieron su recorrido por el campo de Marina de Cudeyo.

Cara conocida

Otro de los jugadores que más expectación creó fue un amateur. Al menos en el golf, ya que es un destacado profesional del fútbol: Aritz Aduriz. El delantero internacional del Athletic de Bilbao, que el pasado jueves jugó contra el Racing en San Mamés, ayer se acercó hasta Pedreña, donde demostró sus grandes habilidades también en esta disciplina. Sin duda, el futbolista rojiblanco fue el que más autografos y fotografías concedió entre los asistentes a la competición.

La jornada se cerró con una comida en recuerdo de la persona que motivó este torneo. Un encuentro en el que se proyectó un vídeo con algunas de las mejores imágenes de la vida de Ramón Sota y al que el vizcaíno Jon Rahm dedicó unas cariñosas palabras. Posteriormente, se hizo entrega a los ganadores y a los jugadores más destacados de la jornada, sus respectivos trofeos acreditativos.