Secciones
Servicios
Destacamos
Lleva meses pensando en esta cita. En el combate por el campeonato de Europa del peso Superwélter. La pelea fechada para el pasado 4 de agosto se fue al garete. A Sergio García, el 'Niño', le tocó prolongar el esfuerzo. El 29 de septiembre, nueva equis en el calendario. Zakaria Attou esperaba. Pero el francés se echó atrás alegando una brecha y cinco puntos de sutura en la cabeza. La Unión Europea de Boxeo no creyó en la excusa y despojó del título al campeón. El torrelaveguense se quedó sin rival:«Me vine un poco abajo, porque a diez días de la pelea, que te digan eso, no motiva nada». Pero el trabajo dio sus frutos y apareció Maxime Beaussire. «Para mí es una ventaja el cambio de rival, porque podemos pelear». En la velada de mañana, en el pabellón Vicente Trueba de Torrelavega, García tendrá por fin la cita que tanto tiempo había esperado. «Llevo once años en esto y ahora empieza a merecer la pena», afirma con contundencia.
–¿Cómo anda de nervios?
–Bueno, los nervios es lo de menos. Haciendo una buena preparación, yo creo que los únicos nervios que puedes tener es por cumplir bien el papel que has estado entrenando. Y nada más.
–Son muchos meses de preparación para una cita concreta, ¿en qué punto se encuentra ahora mismo?
–Ahora mismo ya me véis, que estoy súper abrigado y sudando. Pero me encuentro muy bien físicamente, el viernes –por hoy– cuando me pese y dé el peso, va a empezar todo a funcionar como tiene que ir y, a partir de ahí, a hacerlo lo mejor que pueda. Ya es la segunda preparación consecutiva y gracias a que viene este rival –Maxime Beaussire–, podemos realizar esta pelea. Ya lo estábamos enfocando, lo único que hemos tenido que cambiar la estrategia para un rival diferente, pero la preparación física está y ahora sólo queda adaptarse a él.
–Esta semana previa al combate es la más complicada, ¿no?
–Sí, esta semana es la más sacrificada por el peso, pero bueno, es algo con lo que ya sabemos combatir y lo que queda es hacerlo bien el sábado.
–Con hambre, con sed, cansado... Del pesaje al combate pasan poco más de 24 horas. ¿Da tiempo a recuperarse en ese corto espacio de tiempo?
–Sí. Ten en cuenta que vamos deshidratados. En estas situaciones yo suelo coger unos seis o siete kilos. Se recupera bastante.
–¿Cómo es la dieta previa al combate?
–Hay que comer poco a poco para que no te siente muy mal, porque tienes el estómago muy cerrado después de estos últimos días. Mucho carbohidrato, todo comida limpia, sana, para que a la hora del combate no te encuentres pesado.
–Tras la renuncia del actual campeón de Europa, Zakaria Attou, ¿temió por la celebración del combate?
–Sí, la verdad es que sí. Pensé que iba a ser otra vez como en agosto –cuando ya se aplazó la pelea por una razón similar–. Llevamos todo el verano preparando esta pelea. La estuvimos preparando para el pasado 4 de agosto y no se pudo. En esta ocasión tampoco se pudo hacer con Attou y la verdad es que sí que me vine un poco abajo, porque a diez días de la pelea, que te digan eso, no motiva nada. Sin embargo, al día siguiente me dijeron que había un rival y me vine arriba otra vez.
–A Beaussire este combate le ha pillado de sorpresa. Cambiar de rival, ¿ha sido una ventaja o una desventaja?
–Para mí ha sido una ventaja, porque podemos pelear. Luego me tendré que adaptar a él, como él a mí. No hay excusa y el que mejor lo haga, ganará.
–¿Qué características tiene tu contrincante?
–Es un rival que va hacia adelante, muy constante y que saca muchos golpes. Hemos estado haciendo unas estrategias para frenarlo y yo creo que nos va a ir bien.
–Decía Attou estos días que los españoles no le creen con respecto a su lesión. ¿Le creen o no le creen?
–No sé si será cierto o no, pero es pasado. Ha tenido dos oportunidades, por las circunstancias que sea no ha podido aprovecharlas y ahora nos toca a nosotros. No quiero sacar más el tema, porque ahora los protagonistas somos nosotros y no hay mucha más que hablar.
–Una última cuestión sobre Attou. Ha afirmado que él es «el campeón y mientras lo sea, ese título no vale nada». ¿Qué le parece?
–Bueno, él puede opinar lo que quiera. Yo voy a disputar el título con Beaussire el sábado. El título lo da la EBU –Unión Europea de Boxeo–, entonces, lo que él diga... Yo comprendo que Attou esté molesto. Yo también podría estarlo, pero no ando quejándome. He seguido entrenando y ya está.
–Pelea en su casa, en Torrelavega. Eso, ¿supone un aliciente o un aumento de la responsabilidad?
–Las dos cosas. Un aliciente, porque intentaremos brindar un triunfo a la afición de Cantabria. Y una responsabilidad, porque ya que estás en casa lo quieres hacer bien y tienes un poco esa presión.
–Aunque está centrado en lo suyo, ¿nota el ambiente alrededor de la pelea?
–Sí, la verdad es que oigo hablar de boxeo a gente que nunca ha hablado de ello. Está siendo bastante mediático, la gente se está animando, está viniendo a comprar entradas. Espero que el pabellón sea una bombonera y se viva un espectáculo.
–¿Cuántas veces ha oído hablar en los últimos días de Uco Lastra o de Javi Martínez?
–Muchas... Salen nombres de personas que han conseguido grandes cosas en Cantabria. A ver si nos podemos unir a ellos pronto.
–¿Quién ha sido su modelo a seguir en este tiempo?
–No he tenido ningún boxeador al que haya seguido especialmente. Nos hemos ido formando a nuestra manera. Hay boxeadores que me gustan, me fijo en grandes púgiles a nivel mundial que ya están retirados, pero al final cada uno tiene su técnica, sus armas y hay que usarlas lo mejor posible.
–¿Qué le llevó a decantarse por el boxeo?
–Yo jugaba al fútbol. Cuando iba creciendo, con unos quince años o así, me apunté aquí –al Gimnasio Kronk– y empecé a entrenar. Me gustó y hasta los 17 compaginé el fútbol y el boxeo. Luego ya me centré en el boxeo. Se me fue dando bien y la bola se hizo más grande. Un consejo para quien quiera empezar, que sepa que esto hay que tomárselo en serio. Que en un partido de fútbol pierdes 2-0 y no pasa nada, pero aquí hay golpes. Y a los padres de los niños, pueden estar tranquilos porque es un deporte. Somos deportistas y nos sacrificamos como un futbolista, un tenista o cualquier otro. Creo que esa fama del boxeador macarra se va acabando. Te desahogas aquí y vas para casa bastante tranquilo.
–¿Se ve peleando en Las Vegas?
–Me veo peleando donde más paguen. Me da igual Las Vegas, que Alemania, que Inglaterra o que aquí en Torrelavega. Las Vegas es como un 'top' que te pone la gente, pero al fin y al cabo es un cuadrilátero, igual que aquí, y lo que importa es el título que haya en juego, lo que hagas y con quién te pegues, no dónde.
–La pelea contra Isaac 'Chaca' Real, que supuso la consecución del título Silver de la WBC, ¿marcó un antes y un después en su carrera boxística?
–Se puede decir que sí. Estábamos bastante desanimados, no teníamos oportunidades de nada. Nos dieron una oportunidad muy buena, la supimos aprovechar y ahora ya van saliendo cosas. Miras atrás y piensas, 'llevo once años en esto, entrenando y entrenando, y ahora empieza a merecer la pena'.
–El boxeo vivió años de esplendor en Cantabria, ¿a qué achaca la situación actual?
–Hemos pasado una crisis y eso influye bastante. Antes quizá había más afición. Había menos internet, menos deportes a elegir. El boxeo era un deporte que se seguía. Hubo una época dorada, pero está claro que si la economía de un país no va bien, influye para todo, también para los patrocinadores. Y en deportes pequeños, todavía más.
–¿Cree que su pelea puede ayudar a reanimar al boxeo cántabro?
–Yo creo que sí, que puede tener una buena infuencia. Que gente que no es cercana al boxeo vea que es un deporte, que somos deportistas... Gente que nunca ha ido, ahora oye campeonato de Europa y quiere vivir la experiencia. No todos los días se hace un campeonato de Europa y con un torrelaveguense. Sólo por ser de aquí, ya van a apoyarte. Cuando la Gimnástica ha estado en fase de ascenso, hasta el que no le gusta el fútbol va, apoya y luego lo celebra. Al final es algo de tu ciudad. Y es algo que gusta vivir y espero que la gente se lo pase bien y disfrute con todo.
–Para quien no le conozca, fuera del cuadrilatero, ¿quién es Sergio García?
–Pues un chico normal, que trabaja –tengo atracciones de feria–, que tiene una familia y entrena. Lo voy compaginando y ojalá podamos dar un pelotazo ya con esto.
–¿El 'Niño' se ha hecho mayor?
–Sí, ya me sale barba (risas)... Y ya tengo un niño, así que sí. Pero el mote queda, hasta que me retire.
–El boxeo ha dado grandes películas ¿Cuál es su favorita?
–Están las de Rocky, que son películas que todo el mundo ve y se anima con ellas porque motivan, pero quizá la de 'Million Dollar Baby' es la que más me gustó.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.