Óscar González gana su décimo Torneo del Banco Santander

Más allá de las dificultades de derribar bolos de dieciséis, dieciocho y veinte metros, los jugadores tenían que poner atención en no pasarse del tiempo estipulado por la organización para realizar las seis tiradas, es decir, trece minutos. Los únicos que superaron esos minutos fueron Mario Pellón y Pedro Gutiérrez, que tuvieron un bolo de penalización en su marcador final.

Tras las tiradas de cuartos de final, lograron acceder a semifinales, a corro libre, los González, Víctor y Óscar, que se iban a ver las caras entre ellos, y Manuel Domínguez y Jesús Salmón, protagonistas de la primera semifinal. El de Meruelo arrancó mejor de tiro largo, pero con empate a uno en el marcador (se jugaba a dos chicos hechos), perdió un cierre que les costó la derrota después de que Salmón embocara desde veinte metros. La segunda semifinal se decidió por un bolo y cayó del lado de El Junco, que no tuvo fortuna a la hora de embocar, pero sí tuvo mejor tino que Víctor desde la zona de birle.

Nueve torneos en un lado, el de Óscar, ocho en el otro, el de Jesús, y la sensación de que lo bueno nunca pasa de moda. Con la necesidad de hacer tres chicos para ganar y un cheque de 15.000 euros en juego el de Liérganes puso tierra de por medio en un visto y no visto gracias a un cierre de postre a bolos de tiro corto y un emboque que, no sin apuros, le permitió salirse con un panojazo final. Salmón, contra las cuerdas, no tiró bien en el inicio del tercer parcial, algo que El Junco no aprovechó por culpa de una blanca de tiro. Con todo, la final ya había puesto camino al Miera. Óscar se llevaba el Santander.