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Óscar González no estará esta tarde en los octavos de final del Campeonato de España. Un mal comienzo y una bola queda superaron al de ... Liérganes, que de atrás no pudo arreglar el desaguisado. Fue una jornada irregular tras la que Víctor González es líder con 143 y Jonathan García marcó un corte bajo con 118 palos.
Después de que los registros de la primera jornada fueran bastante bajos, los favoritos llegaban con las orejas pinadas y sabedores de que el corro preparado por Pablo Menéndez iba a pedir el carné. Una jornada de supervivencia para algunos y de marcaje para otros, los aspirantes a llevarse el triunfo mañana por la tarde.
A diferencia de lo ocurrido 24 horas antes, la tarde comenzó con registros importantes. Fran Rucandio y Alberto Díaz, este último con un emboque, derribaron 133 y 136 respectivamente, lo que les lanzaba hacia la siguiente ronda y les colocaba, además, en el grupo de los elegidos. Después de que dos representantes de otras territoriales como Adrián Gándara (Cataluña) y Nazario García (País Vasco) tuvieran un paso más que digno por el torneo llegó el turno de uno de los grandes favoritos al título, un Carlos García que ya sabe lo que es triunfar en la Semana Bolística al ganar El Millón y que, sin embargo, no arrancó con el mejor pie.
El zurdo jugó bien a raya alta, muy sólido, y con 70 palos apuntaba a jugada grande. Sin embargo, dos birles de uno en la quinta y su mal juego de tiro largo al pulgar enfriaron un registro que no pasó de los 125, muy alejados de lo que necesitaba para estar en la pomada por el Nacional. Cierto es que el de Andros suele ir de menos a más. Hasta el parón para el descanso de media tarde la tónica se mantuvo como el concurso de Carlos, discreto. Con la caída de la tarde era el turno de los cuatro favoritos, que se vieron precedidos de los 131 palos de Carlos Gandarillas, un jugador al que si le aguanta la espalda, que ha tenido tocada todo el curso, es candidato incluso a meterse en el podio.
La traca final la iban a protagonizar los que eran, junto a García, los cuatro principales aspirantes al podio. Dos leyendas, Salmón y Haya, y los dos pesos pesados del panorama bolístico, Óscar y Víctor. Fue el de Camargo el que llevó la manija del duelo entre paisanos gracias a un concurso cimentado en el birle y en el que, tras estar a punto de embocar con su penúltimo lanzamiento, se plantó en 138 bolos. Su compañero de tirada, más irregular, no pasó de los 124.
En el duelo entre los gallos comenzó mejor Víctor, que abrió con dieciocho por lo catorce de El Junco, que no atrapó madera tampoco con su primera bola de la segunda mano. El resto de la tirada no fue por mejores derroteros y, tras dos manos, la cifra era de solo 25. Preocupante para él, sobre todo porque un mal concurso le podía dejar fuera de la pelea por el título. Tampoco Víctor asustaba, aunque con sus 33 palos al menos iba en positivo.
La situación para el de Liérganes se agravó en la cuarta mano por culpa de una bola queda que dejó su registro a raya alta en 45. Es decir, necesitaba 74 de atrás para superar el primer corte. Su juego mejoró en las dos tiradas a la mano de tiro largo (en la quinta estuvo a un paso de embocar), pero con todo necesitaba 40 en las dos últimas para igualar a Jonathan García. Con el emboque como única solución Óscar lo rozó con la primera, dejó de caja la segunda y cerró la tercera. Tras fallar la segunda bola de birle, el de Andros decía adiós al Nacional
Mientras, a lo suyo, Víctor cerró su concurso en 143 palos, con una última mano de 22, para colocarse con tres bolos de ventaja sobre Alfonso Díaz. El corte lo cerró Jonathan García con 119 bolos.
En orden inverso a la clasificación los dieciséis mejores disputarán esta tarde, desde las 15.00 horas, los octavos de final.
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