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Leo Cardoso, con gesto serio en el encuentro ante el Ibiza, el rival que ha superado a los cántabros en la lucha por la permanencia. Javier Rosendo
Que sólo sea un hasta luego

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El Textil Santanderina se despide de la Superliga Masculina tras siete temporadas en la máxima categoría del voleibol español

Domingo, 14 de marzo 2021, 08:02

Era un 12 de octubre del año 2014. «El Textil Santanderina, de Santander», decían por la megafonía del pabellón Los Montecillos de Dos Hermanas (Sevilla). El Cajasol recibía al Textil Santanderina en el primer partido de la Superliga Masculina de esa temporada. El estreno de ... los cántabros entre la élite del voley y que se perdió por 3-0. Tocaba explicar. Que no. Que somos de Cabezón de la Sal. Un pueblo de Cantabria, que da nombre a un municipio, de poco más de 8.000 habitantes entre todas sus localidades. Los ojos en Sevilla se quedaban sin parpadear. «¿Cómo? ¿Y en Superliga?». Empezaban las conjeturas. «Habrá un millonario como mecenas del equipo». Y más explicaciones. Que nos apoya una empresa del pueblo, desde siempre, y que ya es historia en cuanto a longevidad en el patrocinio de un equipo -llevan juntos 45 años-. Lo demás, apoyos institucionales, lo que puedan aportar pequeños comercios, los socios, las entradas, la rifa en la grada... Y toneladas de trabajo desinteresado e ilusión. Eso tocó explicarlo por Almería, Teruel, Gran Canaria, Madrid... Seis días más tarde, el 18 de octubre, el Textil Santanderina se estrenaba como local. Y la fiesta no pudo ser más sonada. Victoria, por 3-2, ante el L'Illa Grau de Castellón. «Yo, por entonces, no estaba en la directiva. Era un aficionado más», señala Felipe Merino, el actual presidente del Textil Santanderina. «Fue un espectáculo. Y en un pueblo como Cabezón, ver jugar a un equipo de Superliga..».

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