El Textil ya está en las semifinales

Un Matilde de la Torre con una entrada ya respetable y bullicioso a más no poder se disponía a ver otra vez voley. Enfrente de su Textil, un Almoradí que ya había jugador por la mañana ante el Barça y al que no le quedaba otra que ganar. Sí o sí. Una derrota, y para casa. Y al contrario. Un triunfo del Textil Santanderina significaba ya el pase a las semifinales del sábado, esas que dan el billete a sus ganadores para la Superliga Masculina. Y la cosa no empezó bien para los alicantinos y sí para los de casa. Como si el Textil no acusase el mes de parón entre el final de la Liga y esta fase de ascenso. Los dos primeros puntos fueron locales y el parcial se extendió hasta el 4-1 con un remate de Contreras. Al Templo del Norte tampoco se le había olvidado animar. Entre punto y punto, música, bombo, jolgorio...

Pero el Almoradí se sacó los nervios. A base sobre todo de estrellar sus remates en bloqueo de los cabezonenses, logró voltear el marcador hasta colocarse con un 4-5. Pero la reacción levantina no fue más que un espejismo. Lo que los de Marcelo de Stéfano tardaron en carburar como es debido. Entre aciertos locales y fallos visitantes, el Textil Santanderina puso el 11-6 en el luminoso, merced al saque explosivo del 'Coco' Linares. El Textil empezaba a encarrilar su pase a semifinales. Con un 13-9, Pedro Miralles –jugador y a la vez entrenador del Almoradí– pedía el primer tiempo muerto del encuentro para el Almoradí. La cosa no pintaba bien para los suyos.

Y el tiempo muerto tampoco es que surtiese demasiado efecto. Porque el Textil se dedicó a administrar la ventaja de una forma cómoda. El Almoradí lo intentaba, como con una 'salvada' casi imposible –y que el público aplaudió de inmediato– que al final derivó en punto cántabro para el 14-10. Con 16-12, Miralles volvió a parar el partido y tras él, los alicantinos se acercaron hasta un peligroso 16-14. Pero hasta ahí llegaron. Un parcial de 5-0 ya colocó un 21-14 que dejaba pocas dudas de para quién iba a ser el primer set. El Textil lo cerró con un claro 25-16.

Los alicantinos empezaron dominando el segundo parcial. Un 0-2 a su favor. Otro espejismo. Porque el Textil salió de la reanudación con una marcha más. Dos Santos y Contreras empezaban a hacer estragos en el bloqueo y Linares y Villarruel a clavar remates en la zona del Almoradí. Con 11-5, Millares paraba el partido. Pero el Textil no estaba por la labor de aflojar. Espoleado por una grada que cada vez cogía más temperatura, los de Marcelo de Stéfano se colocaban con un 20-13. Miralles pedía otro tiempo muerto para intentar evitar lo inevitable, pero no pudo. Un bloqueo alicantino ponía el 24-14 y la primera bola de set. Y no hizo falta ninguna más. El remate fuera del Almoradí significaba el 2-0. El triunfo estaba un poco más cerca.

Con el Textil lanzado y el Matilde de la Torre ya en plena forma animando a los suyos, tocaba cerrar el partido. El inicio de ese tercer parcial fue diferente a los dos anteriores, con los alicantinos algo más respondones (8-6). Esta vez, el Textil no lograba despegarse, bien por errores propios, bien por aciertos del Almoradí. Fue Dos Santos, con un remate, el que subía el 17-14 y empezaba una renta que parecía ser definitiva. Con 21-15, hasta se retiraba el capitán, Fran Calzón, para recibir la ovación de todo el Matilde de la Torre.

Pero el Almoradí tiró de orgullo. Al menos, para despedirse con honor. Los alicantinos empezaron a enjugar la renta y con 23-22, Marcelo de Stéfano pedía su primer tiempo muerto de la tarde. Con empate a 23, un remate fuera del Textil significaba la primera bola de set, que se salvó al mandar el balón contra el bloqueo alicantino.

Tras el empate a 25, llegaron las alternativas en el luminoso. Dos bolas de set visitantes, otras dos locales... Cebrián, con una gran finta, puso el 30-29 y en medio de un griterío ensordecedor, Vergne mandó una bola fuera para el 31-29 que clasificaba al Textil para las semifinales.

«El equipo ha estado bien, a pesar de la falta de ritmo», señalaba Marcelo de Stéfano. «Con altibajos debido a la falta de competición, pero manejando el partido». Este viernes toca el Barça. «Un equipo fuerte. El planteamiento será muy diferente». El premio para el ganador, ser el primero del grupo de cara a las semifinales del sábado.