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El número de peñas inscritas en las ligas regionales de bolos se mantiene estable con respecto a lo previsto en 2020. Las 148 entidades que ... tienen previsto competir este curso son una menos que las que tenían previsto hacerlo el pasado año, cuando la pandemia hizo estallar por el aire todo lo agendado. Al final fueron 106 entre bolo y palma y pasabolo losa, una cifra alta dadas las circunstancias que se vivían en ese momento.
Por categorías, en Primera serán 13 las peñas que salten a la bolera. Superadas las dudas de alguna como Renedo, que ha logrado salir adelante con nueva directiva presidida por José Luis Lavín Cobo, la retirada de La Carmencita en 2019 y la ausencia de descensos en 2020 hace que sean impares las partidas que compitan en la categoría. Entre las ascendidas, una histórica como San José o dos debutantes como Boo de Piélagos y Carandía Construcciones Calante.
En Segunda Especial han sufrido dos bajas, las de La Portilla, que competirá en Tercera, y la de Mazcuerras. Serán 24 las peñas en liza, divididas en dos grupos de 12. En Segunda, con solo una baja, la del equipo filial de Laredo, serán 36 las cuadrillas que se jueguen la competición, divididas en tres grupos de doce conjuntos.
Otras tres peñas, Quico Galuza, Comillas y Casa Cholo, han decidido no salir a jugar en la Tercera, aunque son otras cinco las que se han apuntado nuevas, entre ellas otros dos filiales de Sobarzo y de J. Cuesta. Destaca además la presencia de Elechino, una peña histórica que retorna a la competición tras algunos años de ausencia.
La categoría de veteranos ha perdido un equipo en el global tras la desaparición de J. Cuesta, Torrelavega (las pérdidas de Luis Bustamante o Luisón Egusquiza son difíciles de superar), Abanillas y Aguanaz. Por contra, formarán parte de las dieciséis peñas del torneo Cortiguera, Orejo y Luey.
Completa el cuadro de la modalidad de bolo palma la categoría femenina, en la que los nuevos equipos se imponen a los desaparecidos. Los Remedios, Peñacastillo y Rebujas han dado el paso adelante y han apostado por formar cuarteto para disputar la Liga, mientras que San Lorenzo de Parbayón y Concejón de Ibio no han podido sobrevivir a las circunstancias y a la escasez de jugadoras.
Más allá del bolo palma, el resto de las modalidades han logrado paliar la crisis con holgura y, aunque todas han perdido alguna peña, la cida ha sido moderada. En pasanolo tablón son dos las peñas que no han podido formar plantilla, Fermín y La Gándara de Soba. De esta manera, además de las cuatro que competirán en la Liga Nacional, serán catorce (ocho en primera y seis en segunda), los conjuntos sobre las boleras.
En pasabolo losa, las cuatro bajas con respecto a los inscritos en enero de 2020 serán cubiertas por tres peñas que se estrenarán en 2021: La Garma Pontones, La Garma Omoño y La Garma Horna, que sustituyen a otros tres equipo del mismo Ayuntamiento de Ribamontán al Monte.
Finalmente, en bolo pasiego solo estará ausente de la competición El Rosario, que jugaba en Primera Categoría. Con un total de quince peñas inscritas, ocho se disputarán la máxima categoría y siete jugarán en segunda. Pasiego y tablón son las únicas modalidades en las que no se ha incorporado ninguna peña nueva este año.
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