Vicente Diego hace historia al ganar en casa el Memorial Calixto García

La primera semifinal fue un duelo entre el de Riotuerto y el de Casar por ser el encargado de marcar el corte. La madera se arrastraba de la ronda anterior y al final fue Diego, que jugaba en casa, el que con 126 impuso la obligación a los protagonistas de la segunda semifinal. En busca de ello comenzó Mario Ríos, que en su primer lanzamiento estacó por el lado bueno y dejó un birle al lado de la caja que bajó con siete palos. Pese a ello el de Entrambasaguas no pudo lograr los 127 que necesitaba y se quedó a las puertas de una final a la que Víctor llegó tras derribar 152 palos.

En el epílogo, que se dirimía a tres chicos hechos, golpeó primero Víctor, que cerró de postre desde tiro corto. En el segundo, de veinte metros y con el emboque más fácil posible, Vicente Diego acertó con su primer lanzamiento para igualar la contienda. En el tercero se repitió lo ocurrido en el primero, aunque de dos tiradas, mientras que en el cuarto el de Peñacastillo se bajó a dieciséis metros y el valdáligo situó el cachi en la diagonal, una táctica que le sirvió para empatar de nuevo. En el definitivo, el de Casar lo bordó para, en dos tiradas, ser profeta en su tierra y entrar en el olimpo de los triunfadores bolísticos.