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Tres años después de que Dani Sordo y Carlos del Barrio volvieran a formar equipo, la pareja cántabra terminaba ayer en el Rally de Montecarlo su segundo ciclo como piloto y copiloto, con un quinto puesto en la prueba más carismática del Mundial WRC. Una ... despedida para la que todos deseaban un podio, y aunque no pudo ser, sí queda en su palmarés conjunto las dos victorias en Cerdeña y otros tantos títulos en el certamen de constructores.
Dani Sordo seguirá en Hyundai Motorsport con Borja Rozada a su derecha, mientras Carlos del Barrio comienza un nuevo programa deportivo en el WRC 3 junto al joven piloto paraguayo Fabrizio Zaldívar y un Hyundai i20.
La quinta plaza en la clasificación de Montecarlo no contentaba al piloto cántabro que, tras perder mucho tiempo durante el primer día, el resto de la prueba, y tras el abandono de su compañero Ott Tänak, se ha limitado a no cometer errores y llevar su Hyundai hasta la meta con el fin de sumar puntos para la marca coreana en el certamen de constructores.
Sordo no estaba satisfecho de su rendimiento en el principado. «El primer día nos descolgamos mucho y después hemos ido a remolque. Y aunque unos tramos los hemos hecho mejor y otros peor, en general no puedo irme contento a casa. Hay que empezar a trabajar para estar al cien por cien, aprender de los errores y estoy seguro de que en los próximos rallies estaremos luchando por los puestos de cabeza».
Ayer, la última etapa no deparó muchos cambios en la clasificación. Sébastien Ogier (Toyota) lograba una nueva victoria en Montecarlo por delante de su compañero de equipo, Elfyn Evans, y de un Thierry Neuville (Hyundai), que finalmente ascendía al tercer puesto tras el pinchazo del joven Kalle Rovanperä (Toyota), que finalizaba cuarto de la general por delante de Dani Sordo.
El heptacampeón del mundo sumaba su octava victoria (siete en el WRC y la de 2009, cuando no fue puntuable para el Mundial) en Montecarlo. «No ha sido un mal final para el fin de semana. El coche ha estado increíble y ha sido un placer pilotarlo en los tramos que rodean mi lugar de nacimiento. Casi tengo lágrimas en los ojos y creo que fue una buena decisión continuar un año más», declaraba un Ogier que también tenia palabras de agradecimiento para el nuevo jefe de equipo en Toyota, Jari Matti Latvala, que años atrás fue compañero de Ogier en Volkswagen y rival en las especiales cronometradas. «¡Bienvenido jefe, con una victoria!», añadió el galo.
La siguiente cita del Mundial será el Rally Ártico Finlandia, del 26 al 28 de febrero. La prueba se adentrará en el círculo polar ártico y tendrá lugar en los alrededores de Rovaniemi, la ciudad donde vive Papá Noel.
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