«Sabemos que es muy duro, pero tengo una confianza ciega»

«Vamos con la ilusión del primer día pero con la experiencia de haber acabado ya un Dakar. Sabemos que es muy duro y que es una carrera de fondo, tendremos que tener paciencia y saber sufrir pero confío ciegamente en el nuevo Polaris, en el instinto para la navegación de Rafa Tornabell, que como siempre será fundamental, y en todo el equipo», explicaba ayer el veterano piloto cántabro, un debutante mucho mayor de lo habitual en su primera experiencia en el gran raid que ahora acude con la lección aprendida... y con la satisfacción del buen resultado del año pasado, en el que no solo terminó la competición, sino que lo hizo en la cuarta plaza. Con muy pocos buggies en liza, pero si ya estar entre los elegidos que llegan a meta ya era un éxito más lo fue transitar la zona media.

«El objetivo claro es llegar a la meta, aunque también es cierto que intentaremos alcanzar la mejor clasificación posible. Sabemos que será muy complicado y todo será nuevo para nosotros, ya que esta zona de Arabia, que es nueva este año, no la conocemos como el terreno en el que disputamos el Dakar en el 2018», dijo. Peña añadió que «el coche es diferente al que utilizamos la vez anterior. Es el nuevo modelo con Turbo que nos da más potencia y a la vez es más ligero. Me gusta mucho más que el anterior y creo que irá perfectamente».

Junto al cántabro, escoltándole como lo hará en la prueba, estaba su copiloto Rafa Tornabell. Un compañero que además es amigo y que destacaba ayer en uno de los salones del Tenis. El copiloto destacaba «el lado humano de José Luis, más allá del piloto, es una persona fantástica que te ayuda en todo lo que puede y el secreto de nuestro éxito reside en la amistad que hemos cimentado durante estos años». Se mostró en sus palabras más optimista que el piloto: «Será un Dakar con muchas sorpresas y donde una buena estrategia de la carrera será muy importante. En este sentido, creo que Jose Luis y yo estamos muy adaptados el uno al otro y esto nos va a venir muy bien».

En una presentación en la que estuvo arropado no solo de familia y compañeros de equipo, sino también de algunos s de sus patrocinadores Peña presentó su proyecto Dakar 2020 para disputar, por segunda vez, el desafío automovilístico más exigente del planeta. La Real Sociedad de Tenis fue el escenario elegido para una cita que antecede al que será el gran reto: enfrentarse a la arena saudí como hace dos años lo hizo en Perú.

En 2018 Peña y Tornabell fueron cuartos en su categoría de buggies. Era su debut en el Dakar y hasta los últimos días aspiraron al podio en una clasificación en la que finalmente solo terminaron la carrera seis equipos. El año pasado no tomaron parte en la cita sudamericana, que en la próxima edición se traslada a Arabia Saudí, pero a cambio obtuvieron muy buenos resultados en otros exigentes raids. Terminaron en el tercer puesto en el Campeonato del Mundo de cross country y se proclamaron subcampeones del Silk Way Rally (de Rusia a China). Al finalizar el acto, los familiares, amigos y presentes en la Real Sociedad de Tenis pudieron felicitar y trasladar sus mensajes de ánimo a los pilotos.

Quien no estuvo en la presentación fue Chus Puras, de modo que habrá que esperar para ver la imagen juntos de los dos cántabros que coincidirán en el Dakar, lo que constituye otro hito. Antes solo otro pionero, Álvaro Ochagavias, había participado en la prueba , en su caso al volante de un camión. Desde hace dos años ya tiene relevos en dos veteranos, uno contoda una carrera a sus espaldas y otro que la ha empezado tarde, pero con fuerza, y que todavía tienen mucho por decir.