El Oviedo tiene cuatro días para pagar al Racing o Koné regresará a Santander

Al delantero, que llegó lesionado al Carlos Tartiere, le ha costado adaptarse al equipo azul, pero finalmente ha terminado causando buena impresión. Aún así, la directiva carbayona guarda silencio, aunque hace meses -allá por diciembre- salió a escena admitiendo que el futbolista interesaba, pero que en ningún caso abonarían tal cantidad. En la capital del Principado lo que se cuenta en el entorno del equipo es que sí quieren quedarse con él, pero que apurarán sus opciones para que el traspaso a pagar sea muy inferior a los 1,8 millones en cuestión.

Varios escenarios

De aquí al 30 de junio existen varios posibles escenarios; el primero y a priori menos posible parece que el Oviedo sea capaz de reunir el montante total de la operación. Por ello se espera una posible negociación en los próximos días, ya que pasada la fecha marcada los asturianos ya no tendrían ningún derecho preferencial sobre el jugador. El segundo de los escenarios es que se consiga llegar a un acuerdo por una cifra menor y de esa manera Koné seguiría vistiendo de azul y el Racing ingresaría dinero, algo que necesita más que nadie.

La tercera posibilidad sería que el jugador regresara a Santander, cosa totalmente factible dado que tiene contrato en vigor con el Racing. Si se diera este caso, los vediblancos tendrían que afrontar su ficha de alrededor de los 100.000 euros, una cantidad que es probable que doble a la del resto de compañeros y cuerpo técnico. Desde El Sardinero valoran está última opción, sobre todo pensando en el potencial deportivo del delantero y las garantías goleadoras que le reportarían al equipo. Esta ultima opción supondría un esfuerzo enorme en el capítulo económico, pero contarían con un futbolista que conocen para la demarcación más delicada del equipo.

El cuarto y último escenario que se daría si el Oviedo no ejecuta su opción de compra es que Koné regrese a Santander, pero el club decida traspasarle a un tercer equipo. De este modo, el Racing intentaría sacarle un partido. El delantero tiene suficiente cartel como para poder ser interesante para muchos clubes de la Segunda División. En definitiva, el desenlace sobre el futuro del costamarfileño está a punto de resolverse. Es obvio que el jugador querrá jugar en una categoría superior a la Segunda División B después de su trayectoria, pero su situación actual es la que es.