El Grupo Pitma formaliza mañana su entrada definitiva en el Racing

Así será como llegue oficialmente a las oficinas de los Campos de Sport de facto ya ha deshecho las maletas la nueva esperanza blanca del Racing; el grupo empresarial que en forma de inversión en acciones, contrato de soportes e intermediación con la publicidad institucional rescatará al Racing, si se cumple la hoja de ruta prevista, de su crítica situación económica en una inversión a largo plazo que le permitirá explotar comercialmente los derechos del club durante una década.

Hasta hace unos cuantos meses, ITM era una firma desconocida para la mayor parte de los cántabros. O Grupo Pitma, que es la denominación global del conglomerado en lo que ha sido una sopa de letras para los seguidores del club, expectantes ante el nuevo inversor y en muchos casos escarmentados por experiencias anteriores. Precisamente esos antecedentes han despertado recelos que no tienen relación directa con la empresa cántabra, sino con lo ocurrido en las dos últimas décadas en torno a la propiedad e inversores del Racing. El Grupo ITM es un holding cántabro con una actividad muy diversificada que ha crecido exponencialmente durante el último lustro, fecha de creación de la mayor parte de las firmas de las que forma parte. Su capital social es de 24.272.600,00 euros, con 13.489.000,00 desembolsados según los datos de Infocif.

De acuerdo con el Registro Mercantil, hasta 27 sociedades cuelgan de Grupo Pitma (marca comercial de la mercantil Tower Valley), el holding en el que se agrupa el entramado torrelaveguense, que tiene su sede principal en Rinconeda y en el polígono industrial de Mies de Molladar, en Cartes, pero que también está instalado en Madrid y experimenta una constante política de expansión. Todo esto según el Registro Mercantil, su propia web y la información publicada disponible, puesto que la firma ha declinado ofrecer información tras los reiterados requerimientos de El Diario Montañés. La política de comunicación es sencilla: No hay comunicación. Una decisión que resulta llamativa en un grupo que además de patrocinar al Racing hace lo propio con la Gimnástica y mantiene un equipo ciclista élite sub 23: el Aldro, dirigido por ManoloSaiz.

Aunque una de sus firmas franquicias, ITM Global, nació en 1995, el crecimiento de todo el grupo conformado en torno a la primitiva unidad de negocio.

Según su propia web, ITM Global emplea a 240 personas, a las que se deben sumar las integradas en el restos de marcas y firmas del grupo hasta acercarse a los 3.000 trabajadores entre puestos directos e indirectos o franquiciados, según señaló la propia empresa en la inuaguración de la sede de Rinconeda. Sin embargo, la compañía no ha ofrecido datos oficiales al respecto.

De nuevo según su web, ITM nace en 1995 como «empresa dedicada a instalaciones de telecomunicaciones y seguridad para particulares y empresas», germen que «a finales de los noventa» dio lugar a «ITM Sistemas, empresa que suma las divisiones de proyectos, instalaciones y energía a su cartera de servicios hasta que, en 2015, todo queda integrado bajo una misma marca: ITM Global».

Esta última se define como «la integración de las actividades realizadas por los profesionales que componen las divisiones de seguridad, proyectos, servicios, energía, telecomunicaciones y sistemas». Porque desde las cámaras de videovigilancia el Grupo Pitma ha expandido su negocio hacia la comercialización de energía, las agencias de formación y trabajo temporal, correduría de seguros, servicios de telecomunicaciones, transporte de mercancías, asesoría jurídica y venta de diferentes productos al por mayor y al por menor... de acuerdo con el objeto social de sus diferentes firmas.

Al frente del holding figuran Alfredo Pérez (Torrelavega, 1969) y Pedro Ortiz (Santander, 1969), copropietarios al 50% del grupo, que entraron el pasado mes de noviembre en elConsejo de Administración del Racing junto a su abogado de confianza, Cristóbal Palacio (Polanco, 1970).