Maldito domingo

Esta vez el conjunto azulgrana nos ha dado de nuestra propia medicina y supo jugar con la ansiedad del marcador para matarnos a la contra, ¿nos suena verdad?. Es la receta que le hemos aplicado a casi todos los rivales esta temporada y que además también funcionó a la perfección durante cuarenta minutos. Y fue entonces cuando el equipo cántabro se volvió a suicidar por sus propios errores. Ya vimos algo parecido en Guijuelo. Se volvió a repetir con resultados casi desastrosos en Villanueva de la Serena. Y se cayó con todo el equipo ante el Barça B. En una eliminatoria donde la única ventaja clara del Racing era su experiencia, acabó comportándose como un pardillo en todas las acciones importantes del partido. Esta vez sí volvieron de golpe todos los fantasmas de Reus. Maldito grupo catalán que se ha empeñado en amargarnos la vida y enterrarnos un año más en esta Segunda División B.

Supongo que estos días habrá que tirar de tópico, repetir una y otra vez que nada es imposible y apelar a la épica para animar a la tropa. La entidad del rival y la ausencia de Prats no facilita la tarea, pero cosas más difíciles se han visto en el fútbol. De inicio habrá que dejar en la caseta el traje de equipo conservador y ponerse el de superhéroe para dificultarle las cosas un poco más al filial. A este Barça ya le hemos visto con viento a favor y sabemos de lo que es capaz futbolísticamente. Vamos a intentar que el partido se convierta en un infierno para comprobar si también los tiene bien puestos cuando tiene que entrar en un campo de batalla. Como consejo le recomiendo a Ángel Viadero que le ponga a sus jugadores el partido entre el UCAM Murcia y el Castilla de hace un año. Igual así aprendemos como habría que haber jugado esta eliminatoria desde el primer minuto.