Álvaro Bustos, tres semanas de baja por una rotura de fibras en el bíceps femoral

Se trata de la segunda lesión muscular, la misma exactamente y en idéntica zona, que sufre el asturiano en la presente temporada lo que supone un contratiempo importante para el jugador, pero obviamente para Solabarrierta ya que Bustos estaba siendo uno de los efectivos más decisivos de la plantilla. Bustos cayó lesionado en la primera vuelta, pero su recuperación coincidió con el parón competitivo que sufrió el Racing con motivo de los positivo que confinó al Leioa. Como consecuencia, el asturiano aprovechó las circunstancias para ponerse a punto y tan solo se perdió un encuentro antes de estar disponible, en aquel entonces, para Javi Rozada.

No fue ese el único problema físico al que ha tenido que enfrentarse el hábil extremo izquierdo; durante el duelo que el Racing mantuvo con el Alavés B en Vitoria, en una jugada desafortunada cayó al suelo y sintió un dolor en la muñeca izquierda. Prosiguió el encuentro, pero finalmente sufrió una fractura de escafoides de la que tuvo que ser operado. Durante dos semanas trabajó con una férula para proteger la zona y volvió a competir hasta que el pasado sábado en Irún de nuevo el infortunio se cebó con el jugador. Su recuperación dependerá de la evolución de la lesión, aunque por mucho que se de prisa una dolencia como la que sufre no cicatriza en menos de dos semanas. Esto significa que no estará disponible el domingo para jugar ante el Arenas ni tampoco es probable que lo esté frente al Amorebieta en la última de las jornadas a la semana siguiente.

En cuanto al resto de la plantilla, salvo Marco Camus, que ayer entrenó al margen de sus compañeros, el resto del grupo esta disponible para el técnico Aritz Solabarrieta.