«La asignatura pendiente del equipo es hacer un partido bueno en nuestro estadio»

Rápido. Como si estuviese ansioso de que llegase el partido del domingo. La rueda de prensa de los viernes de Javier Rozada para hablar del partido de turno, no duró demasiado. Unos pocos minutos para, más que analizar tácticas, rivales o ausencias en los suyos, definir ideas. Y esperanzas. La primera, englobada en un Racing «reconocible» en el estilo de juego que quiere el míster asturiano. La otra, no sólo es deseo suyo, sino de todo un racinguismo que ya casi ni se acuerda de algo así. «La asignatura pendiente del equipo es hacer un buen partido en nuestro estadio, y así poder dar una alegría a los aficionados». No hace falta ser un gran detective para intuir que el entrenador verdiblanco se refería con eso a buen juego, dominio sobre el rival y una victoria por varios goles de renta. Para ello, Rozada pide a los suyos estar «metidos desde el principio en el partido».

El rival, el Alavés B, ya no es un desconocido en este retorno del Racing al infierno de la Segunda B. Porque el filial vitoriano ha visitado los Campos de Sport no hace mucho. El pasado 3 de octubre, en un amistoso de pretemporada, Cejudo adelantó al Racing en el primer minuto y los vascos subieron el empate apenas seis minutos después en un partido que el Racing dominó y que fue de más a menos. El rival de mañana será el mismo que entonces, aunque Rozada augura «un partido muy distinto», ya que a buen seguro que los blanquiazules cambiarán «a cinco o seis jugadores» respecto a aquel bolo ya otoñal. Rozada no ahorra elogios sobre los vitorianos. «Es un equipo que hace las cosas bien. Hicieron una temporada pasada muy buena. Tienen futbolistas con proyección y se han reforzado con fichajes y jugadores de su filial, el San Ignacio». A pesar de que el entrenador verdiblanco cree que el partido no tendrá nada que ver con el de hace días, no le disgusta el esquema de juego del Alavés B. «Su propuesta será idéntica. Y eso nos beneficia».

Algo también cambiará en la tarde del domingo. Y no será la intensidad o lo que haya en juego sobre el 'prao'. Será respecto al choque inaugural de la Liga, frente al Portugalete. Aquel 18 de octubre había 3.045 espectadores en las gradas de los Campos de Sport. Por desgracia, la poca luz que dejaba pasar el maldito coronavirus se ha quedado en nada. Vuelta al silencio. Para intentar contener por todos los medios el avance de la pandemia, regresan los partidos a puerta cerrada. Como ese fútbol de verano que hizo que el Racing terminara con sus huesos en esta Segunda B. La ausencia de los suyos, aunque no fuesen más que 3.045 frente al 'Portu', le hace torcer el gesto a Rozada. «Es que eran esos tres mil y pico y parecía que el campo estaba lleno». El míster ha tardado poco en darse cuenta del mayor tesoro que posee el Racing. «El principal patrimonio que tiene el Racing es su afición», resaltó sin un mínimo de duda. Por eso, añadió que el del domingo, «no es el escenario ideal». Aún con todo, el deseo máximo de Rozada no es otro que hacer ese «partido bueno en nuestro estadio».

El horizonte del deporte se va oscureciendo según también se oscurecen todos los ámbitos de la sociedad por culpa del covid-19. El jueves, el Tropezón veía cómo se suspendía su encuentro ante el Leioa en la Copa Federación a causa de un positivo en el equipo vizcaíno. Y eso puede afectar directamente al Racing. No este fin de semana, sino el próximo. Los verdiblancos rinden visita a los vascos el próximo sábado, 7 de noviembre, a las 17.00 horas. Faltará por ver qué ocurre con el cuadro vizcaíno y los resultados de las pruebas que tendrá que pasar el resto de sus futbolistas. Pero Javier Rozada no quiere por el momento pensar en ese choque en Sarriena ante el Leioa. «La verdad es que no me preocupa el tema», afirmó el preparador asturiano. «Tenemos que centrarnos en el partido del Alavés B, que para nosotros es importantísimo. Y luego, lo que venga». Con una Liga como esta tan corta en su primera fase, en la que cada tropiezo se pagará caro, Rozada aboga por «no despistarnos y dejarnos puntos. Debemos centrarnos en sumar los tres puntos ante el Alavés B. Y el lunes, ya nos centraremos en el partido ante el Leioa».

De cara al encuentro ante los vitorianos, el Racing tiene una baja segura. Álvaro Bustos «está descartado, con una rotura en los isquiotibiales» de la pierna derecha, relató el míster. La duda para el choque será la del brasileño Pablo Andrade. «Tiene un golpe en la rodilla izquierda, que está inflamada», reconoció Rozada. Los demás están en perfecto orden de revista para buscar así ese buen partido en los Campos de Sport que quiere su entrenador.