Secciones
Servicios
Destacamos
Un cambio necesario. Así asumía el Racing hace apenas un mes la destitución de Guillermo Fernández Romo después de cinco derrotas consecutivas, las tres últimas ante rivales en posiciones de descenso. Con graves errores del videoarbitraje en contra, cierto, pero en cualquier caso en una ... grave crisis de resultados que llevó a la propiedad, y en especial al vicepresidente y consejero delegado del Racing, Pedro Ortiz, al despido del técnico madrileño.
Hasta ahora, los cambios promovidos por el Grupo Pitma, o lo que es lo mismo, por Alfredo Pérez y Pedro Ortiz, en el banquillo verdiblanco desde que en 2018 tomaron control efectivo del club - el control lo tenían antes- no habían funcionado. Este caso es, al menos por el momento, diferente.
Desde el cambio de entrenador, y con el borrón de la eliminación en la Copa frente al Linares de Primera RFEF, la llegada de José Alberto López al banquillo ha dado un nuevo impulso al Racing, que bajo la dirección del asturiano suma siete puntos en Liga de nueve posibles. Los correspondientes a las victorias frente al Cartagena y el Sporting y el obtenido con el empate con la Unión Deportiva Las Palmas.
Puntos
7suma el Racing de nueve posibles desde que cambió de entrenador, los correspondientes a dos victorias y un empate
18había conseguido con el anterior cuerpo técnico, que arrojaba un saldo de algo menos de un punto por jornada.
Goles
10había marcado el equipo a las órdenes de Guillermo Fernández Romo, a una media de 0,5 por jornada.
6suma con José Alberto López, a una media de dos tantos por compromiso, que cuadruplica la anterior.
Otro dato especialmente significativo es que los verdiblancos han anotado seis tantos en esos tres partidos, frente a los diez que sumaban a las órdenes de Romo hasta la jornada 20, tres de ellos además marcados por el adversario en propia meta. Se trata de un periodo aún demasiado corto para extraer conclusiones definitivas, pero al menos en estas primeras jornadas el Racing ha conseguido neutralizar los problemas de efectividad que arrastraba desde que arrancó la temporada.
Noticia Relacionada
En estos tres partidos, y a la espera de que se confirme o no la tendencia apuntada, el Racing ha cuadruplicado su capacidad anotadora. Claro que en el partido de Copa frente al Linares, en el que los verdiblancos salieron al campo con varios teóricos suplentes, el equipo adoleció de la misma falta de efectividad.
El relevo en el banquillo ha traído consigo un cambio en el estilo de juego (que no en el sistema, puesto que José Alberto sigue fiel al 4-2-3-1 con Pombo como mediapunta) que al menos por el momento ha dado mejores resultados e imagen.
En cuanto al once tipo, lo más destacado ha sido la entrada de Germán, en el centro de la zaga, y de Saúl, en el lateral izquierdo, en detrimento de los insustituibles para Romo Pol Moreno y Satrústegui. El cántabro da más profundidad a la banda que el navarro, un central reconvertido a la posición, y el cambio en la demarcación releva la vocación más ofensiva que tienen los verdiblancos con su nuevo entrenador.
Más complicado resulta definir sus preferencias en la zona de ataque, condicionado como ha estado por las lesiones, más allá de la evidencia de que por el momento Marco Camus no ha convencido a su nuevo técnico. El ovetense ha depositado más confianza en otro canterano como Yeray, al que ha subido desde el Rayo Cantabria, tanto para los segundos tiempos como el domingo 8, cuando ante los problemas gastrointestinales de Íñigo Vicente optó por el de Isla por delante del santanderino, a pesar de que Camus sea, a diferencia del joven mediapunta, a todos los efectos futbolista del primer equipo racinguista.
Otro cambio de roles ha sido el de Juergen y Aldasoro. con Íñigo prácticamente intocable, las características del colombiano le convierten en teórico titular, pero ante sus lesiones José Alberto ha optado por Aritz Aldasoro y no por un eje por el que Romo había mostrado sus preferencias: Fausto Tienza. El extremeño era el recambio habitual en el eje y titular ante cualquier ausencia de Íñigo o Juergen, pero con el nuevo entrenador ha perdido peso específico y es el guipuzcoano quien está disfrutando de minutos, a la espera de lo que suceda cuando José Alberto vuelva a disponer de todos sus futbolistas.
La llegada de José Alberto ha invertido lo que hasta ahora era una peligrosa dinámica cuando desde que en 2018 se hicieron cargo del equipo Pedro Ortiz y Alfredo Pérez optaban por un cambio de entrenador.
El primero de ellos fue con la destitución de Iván Ania en la temporada 19-20.La llegada de Cristóbal Parralo en lugar del entrenador del ascenso no fue el revulsivo que se esperaba cuando el equipo luchaba por mantener la categoría.Al contrario, el exbarcelonista terminó dimitiendo por sus discrepancias con el entonces director deportivo, Chuti Molina.El tercer entrenador de aquella temporada fue José Luis Oltra, que pese a un tímido atisbo de reacción tampoco pudo encauzar un rumbo que estaba ya muy desviado.
Peor resultado aún dio en el curso siguiente, el 20-21, el relevo de Javi Rozada.El entrenador asturiano solo había dirigido siete partidos (tres victorias, tres empates y una derrota) cuando fue despedido. Ya su contratación fue extraña. No se le presentó cuando se había llegado a un acuerdo con él ante las presiones del director de estrategia deportiva, José María Amorrortu, que convenció a Ortiz en la primera oportunidad para desalojar al ovetense.
El sustituto fue un técnico sin experiencia apadrinado por el propio Amorrortu, Aritz Solabarrieta, que ni encajó bien en Santander ni tuvo buenos resultados. Al contrario, con el vasco el Racing firmó la peor temporada de su historia, al menos desde que se pueden objetivar desde un punto de vista estadístico con la creación en la temporada 1928-29 de LaLiga. El Racing, entonces en la desaparecida Segunda División B, ni siquiera se clasificó para la fase de ascenso de categoría.
Su relevo fue Guillermo Fernández Romo, que permaneció en Santander temporada y media.La del ascenso del año pasado y las veinte primeras jornadas de la presente. Las cinco derrotas consecutivas entre la jornada 16 y la 20 sellaron su destino y propiciaron la llegada de José Alberto, que al menos por el momento puede presumir de ser el único entrenador cuya llegada con el curso comenzado ha mejorado los resultados.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.