Carrera por el liderato

Así que el Racing-Elche es un partido de esos que el lugar común define de seis puntos, aunque el imperativo matemático no esté del todo de acuerdo. Podrían ser siete por aquello de resolver los duelos directos, primer criterio de desempate en caso de igualada al final de la competición regular, pero los de José Alberto cayeron 3-0 en el Rico Pérez, de modo que salvo tarde feliz como aquella frente al Racing de Ferrol (y el Elche no es en absoluto el Racing de Ferrol), esa balanza parece ya imposible de equilibrar.

Un Elche con la flecha hacia arriba vive su primera defensa del liderato precisamente ante el equipo que más veces ha ocupado esa posición de privilegio, y que según lo que ocurra en el duelo norteño está en condiciones de recuperar. A su favor, el mordiente en ataque de unos Andrés Martín, Juan Carlos Arana en incluso Íñigo Vicente que han recuperado las buenas sensaciones, la cohesión de un entorno que pese a las dudas sigue enganchado a la perspectiva , que no obligación, del ascenso y una mejora de juego -no tanto de resultados- que permite albergar esperanzas. En contra, la debilidad defensiva, el propio rival y los problemas en casa de un Racing que no es que llegue con la flecha hacia abajo, pero tampoco lo contrario. Ni sí ni no. Ni chicha ni limonada.

Así se plantea el duelo entre el líder y el tercer clasificado al arrancar la jornada en el partido con el que termina el domingo, que no la jornada. Para eso habrá que esperar a mañana, cuando un sorprendente Mirandés que también pugna por el ascenso directo y presumía de liderato hace solo dos semanas -se lo arrebató precisamente al Racing- recibe en Anduva a un Tenerife que apura sus últimas y escasas opciones de evitar el descenso. Dos equipos, por cierto, que serán además los próximos rivales verdiblancos tras la visita del próximo sábado al Sporting (El Molinón-Enrique Castro 'Quini', sábado 8 a las 18.30 horas).

Llega el Racing casi restablecido por completo de la plaga de bajas que le asoló hace pocas semanas. Le quedan las de Álvaro Mantilla, que está a punto de recuperarse de su nueva rotura fibrilar en los isquiotibiales y Javi Montero sancionado por acumulación de amonestaciones, además, de la de Íñigo Sainz-Maza. Regresa Unai Vencedor tras su sanción de la semana pasada y Jorge Salinas ha entrado en la convocatoria ante la ausencia de Montero y a pesar de que Pol Moreno está finalmente listo si fuera necesario entrar en el terreno de juego.

El líder pondrá además a prueba esa solidez en casa que el Racing no termina de conseguir (es el mejor visitante de la categoría, pero undécimo en su propio estadio) frente a un Elche, y aquí la estadística se alía con los cántabros, infalible en casa, pero al que le cuesta puntuar, y sobre todo ganar, lejos del Rico Pérez.

Enfrente, el Elche de Eder Sarabia, ese técnico que se forjó como segundo de Quique Setién y que tiene una visión del fútbol muy cercana a la del Flaco y el propio JAL. Los ilicitanos llegan confianza. «Si nos ganan, tampoco se nos van a ir mucho, por lo que hay que jugar con soltura y confianza», decía su técnico el viernes con la «ilusión y una responsabilidad» de llegar como líder. Un guiño al rocanrol del que José Alberto López habla tan a menudo, aunque el propio asturiano advierte de que el partido se puede resolver en otras facetas del juego quizá no tan intrínsecas a unos y a otros, como ya ocurrió en la primera vuelta.

No podrá contar con Elbasan Rashani ni Yago Santiago y mantendrá hasta el último momento la duda de Nico Fernández, uno de sus futbolistas más desequilibrantes. A cambio ha reforzado mucho su centro del campo con los fichajes en el mercado de invierno de Valera y Aguado. Visita Santander además con la noticia de su salida del proceso concursal, después de cumplir el convenio con doce años de antelación. Ahora, como le ocurre al Racing desde diciembre, solo debe esperar que termine el trámite para que se le declare oficialmente fuera de concurso, con lo que eso significa no solo para el normal funcionamiento de la sociedad, sino para el cálculo del límite salarial.

La cita se prevé intensa desde muchas horas antes. Por la fiesta convocada en Tetuán para celebrar los 112 años del club, por el indudable atractivo deportivo -y la importancia de los puntos en juego-, por la entrada en los Campos de Sport -aunque anoche todavía quedaba algo de papel a la venta- y por lo afectivo de una previa en la que se homenajeará a Nico Hidalgo tras su prematuro fallecimiento y al 112 en un guiño a la efeméride y se podrá ver en juego la camiseta que celebra el aniversario.

Comienza así un test de marzo que se prevé diferencial con dos enfrentamientos directos por el ascenso y una visita a Gijón que el Racing no quiere ver convertido en los idus en un momento en el que el margen de error se reduce tanto para los racinguistas como para sus rivales. Del desenlace de esta noche dependen, cuando menos, las dinámicas; decidirá en qué sentido apunta la flecha verdiblanca en la larga champa de catorce etapas hasta el final de la competición regular.