Las instalaciones Nando Yosu, desinfectadas, ya están preparadas para el regreso de los entrenamientos

Las instalaciones Nando Yosu de La Albericia se preparan para la vuelta a los entrenamientos de la primera plantilla del Racing, por el momento de manera individual. El primer paso ha sido la desinfección de las instalaciones para prevenir cualquier tipo de contagio de coronavirus.

Los trabajos de esterilización, a cargo de la empresa Savills Aguirre Newman, fundada en el Reino Unido y con más de 30 años de presencia en España, se han desarrollado este miércoles tras una primera toma de contacto ayer. Pasillos, vestuarios, despacho de los técnicos, gimnasio, banquillos, barandillas... Tanto las dependencias interiores como las exteriores utilizadas de forma habitual por la plantilla verdiblanca y su entorno han sido desinfectadas en un procedimiento similar al que la UME (Unidad Militar de Emergencias) y distintas empresas privadas han venido utilizando en residencias de mayores, hospitales, centros de salud y estaciones durante la pandemia.

Los futbolistas verdiblancos retornarán mañana a La Albericia casi dos meses después (la última sesión de trabajo fue el 13 de merzo). Los verdiblancos están citados escalonadamente a partir de las 09.00 horas para someterse a los test (PCR y serológicos) necesarios para la vuelta a los entrenamientos individuales. Finalmente los pasarán pese a su oposición inicial al considerar que hay otros colectivos más esenciales que aún no han tenido la oportunidad de someterse a ellos para comprobar su estado de salud. Como también indicaron, si les obligan, como es el caso, aceptarían, ya que la intención es no dañar al club.

La actividad podrá iniciarse una vez que se conozcan los resultados de las pruebas –se obtienen en un periodo temporal no inferior a 48 horas- bajo los protocolos de seguridad establecidos por el Consejo Superior de Deportes y LaLiga aprobados por el Ministerio de Sanidad.

Por tanto, jugadores y cuerpo técnico deberán esperar hasta el domingo o el lunes para volver a vestirse de corto y saltar, de forma individual y escalonada, al césped, en concreto a los campos 1 y 2 de La Albericia, que son los únicos que se van a usar.