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Leila Bensghaiyar
Santander
Miércoles, 3 de febrero 2021, 12:26
El Racing puede pasar apuros para formar su defensa. El muro verdiblanco se tambalea y corre peligro de derrumbe si se disputa el choque –todo parece apuntar a que sí se hará aunque los jugadores deben pasar antes los test de covid– de este ... domingo ante el Leioa en El Sardinero (17.00 horas). Los diagnósticos se acumulan en la mesa de Solabarrieta. Matic, que no entrenó ayer y se sometió a pruebas de imagen, sufre una lesión muscular de grado I- II en el tercio proximal del recto anterior de la pierna derecha producido del choque en Ibaia ante el Alavés B. El tiempo que el croata no estará disponible no se conoce aún, todo dependerá de cómo evolucione. Algo que deja muchas heridas en un momento crucial y puede suponer un paso atrás porque deja la zaga con un problema de efectivos, sobre todo tras el despido el pasado lunes de Jordi Figueras, para el que no hay recambio por el momento.
No es que el Racing haya tenido nunca overbooking en el centro de la defensa, pero lo cierto que con este contratiempo pasa de tener efectivos de sobra, a la necesidad. Ahora mismo Solabarrieta no cuenta con Óscar Gil, que vio su quinta amarilla en Vitoria y está sancionado; y Mantilla arrastra problemas en el hombro izquierdo, que se le sale continuamente, y de ir a más, pueden hacer que la zaga se quede al descubierto. Un embolado. Un agujero que el técnico vizcaíno podría tratar de tapar con Villapalos, que ya ha actuado como central en alguna ocasión, pero lo cierto es que no ha disfrutado de muchos minutos. También Iñigo, que ya ha demostrado que se desenvuelve bien como central, podría ser un recambio de urgencia en última instancia. Ahora, con la lesión de Matic, la comisión deportiva podría tratar de salir de este lío con la contratación de un central en paro ahora que se ha cerrado la ventana invernal y que el equipo cuenta con una ficha libre.
El secretario técnico Pedro Menéndez, que mete a Nana en la ecuación, reconoce que sí se busca un central, pero «sin prisa». El asturiano confía en que Solabarrieta capeé el temporal usando a Villapalos, o incluso reconvirtiendo a Nana o subiendo a Mirapeix del Rayo Cantabria. «Estoy muy tranquilo con el tema de los centrales. Confío muchísimo en Villapalos y creo que tenemos más opciones. Nana se puede adaptar perfectamente y tenemos en el filial a Mirapeix, que también tiene un nivel aceptable para jugar con nosotros», señaló. Según el secretario técnico la plantilla «tiene suficientes recambios para enfrentarse el domingo al Leioa», pero más de uno puede pensar que estas bajas dejan al descubierto los problemas que puede atravesar el técnico vizcaíno para alinear una defensa de garantías ante el Leioa.
Aunque después del resultado del pasado domingo en Ibaia ante el Alavés B (2-4) parece que los de Solabarrieta comienzan a levantar cabeza. Es cierto que el rival estaba mermado de efectivos –contaba con seis bajas sensibles–, pero el triunfo dejó buen sabor de boca a un Racing que por primera vez fue capaz de ganar fuera de casa y también de remontar un partido. De hecho, ha sido la única vez que ha dado la vuelta a un marcador adverso este curso. Ahora se trata de no perder el ritmo ascendente devolver la solidez defensiva que el equipo tenía como principal virtud a principio de temporada. Se trata de no sufrir en El Sardinero para frenar el fútbol directo del Leioa y todavía más para defender el juego aéreo. Para plasmar sobre el campo la idea de Solabarrieta con una defensa de cuatro muy adelantada, el equipo necesita un defensa rápido y los recambios disponibles no encajan con ese perfil. «Tenemos a Mantilla, y tanto Villapalos como Nana y Mirapeix van a hacerlo bien seguro. Lo de defender y atacar es cuestión de equipo y hace falta que todo él esté alto, que cerremos bien las líneas de pase... Estoy tranquilo», se autoconvencía Menéndez.
Pero la defensa no es la única que cuenta con bajas. El flanco izquierdo también queda huérfano –aunque en su caso sí que hay recambio– con la pérdida de Álvaro Bustos. El jugador se operó este miércoles con éxito de la rotura del escafoides de la mano izquierda que se produjo ante el Alavés B en Ibaia y ya tiene el alta hospitalaria. Ahora, su periodo de baja dependerá de la evolución de su lesión.
El pasado lunes Jordi Figueras dejó de pertenecer al Racing. El central, que fue uno de los jugadores que participó en el ascenso del Racing a Segunda hace dos temporadas, explicó ante los medios cómo se sentía tras su despido. A Menéndez le parece «normal que esté dolido», pero asegura que la decisión se basa en criterios «estrictamente deportivos», además el secretario técnico hizo hincapié en que Figueras «ha cobrado su contrato íntegro y tiene la posibilidad de firmar por otro club que tenga una ficha libre». El asturiano quiso recalcar que «no solo salió Figueras, también lo hizo Balboa porque ha dado un rendimiento bajo y ha perdonado casi la mitad de su sueldo, y también salió un lateral izquierdo», comentó en referencia a Joan Maynau, que tras rescindir su contrato con el Racing este miércoles anunció su fichaje por el Llagostera, equipo desde el que llegó al club cántabro.
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