Otra vez el lío de las entradas

El San Sebastián de los Reyes, el pasado 1 de abril, accedió a reducir el coste de las entradas a 15 euros y recibió a cerca de un millar de seguidores verdiblancos. Una semana después, el Dux Internacional se mantuvo firme en su precio de 20 euros y aún así, 420 seguidores racinguistas -según los datos aportados por el club madrileño- adquirieron su localidad para el choque en Villaviciosa de Odón.

Con ese antecedente y teniendo en cuenta que se está jugando entrar en el play off de ascenso a Segunda, el Rayo Majadahonda no parece que vaya a atender a las advertencias de los colectivos racinguistas ni a las peticiones del club cántabro, que en los Campos de Sport establece siempre un precio de 15 euros para las aficiones visitantes. Y ese es el coste que APR y La Gradona entienden como adecuado para un partido de la tercera categoría del fútbol español.

Por lo tanto, no habrá viajes organizados al Cerro del Espino, pero a buen seguro sí que se juntarán unos cuantos cientos de aficionados verdiblancos en las gradas del feudo majariego. Seguidores que viajen desde Cantabria y, sobre todo, aficionados que residen en Madrid y que tienen contadas ocasiones para ver a su equipo en directo. La mayoría de ellos está de acuerdo en que el precio de las localidades es desmesurado, pero es algo que están dispuestos a asumir para no perder la oportunidad. Y menos aún cuando el Racing está a punto de certificar el ascenso a Segunda División.

De todas formas, el racinguismo no podrá celebrar el campeonato en el Cerro del Espino, ya que para lograr el título en esta primera 'bola de torneo' los de Guillermo Fernández Romo deben ganar el sábado al Rayo Majadahonda y esperar a que el Deportivo pierda el domingo a mediodía en el campo del Talavera, que se juega la permanencia.

El estadio majariego es un lugar de buen recuerdo para la afición racinguista, ya que allí el equipo de Ángel Viadero, en la temporada 2016-17, logró encarrilar la primera eliminatoria del play off de ascenso. El Racing, en aquella ocasión, llegó hasta la última ronda, en la que cayó goleado en los Campos de Sport por el Barcelona B.