«Este equipo y los jugadores somos capaces de lograr lo que nos propongamos»

«El Racing ahora está formando un gran proyecto. Sin duda ninguna para mí suponía un saltito y un paso adelante en cuanto a la categoría, pero creo que el proyecto futbolístico el grupo que había y la confianza que me transmitieron tanto el míster como Mikel en el proceso de negociación fue un peso enorme para decantarme por venir», ha explicado el jugador, que ha estado acompañado por el Víctor Diego, director de relaciones institucionales del equipo, y por el director deportivo Mikel Martija.

«Es un jugador polivalente, mediocentro que también puede jugar por la izquierda, con buen trato de balón y que encuentra a todos sus compañeros y los apoya. Es muy dinámico, está en un buen momento y creo que nos va a venir muy bien», ha dicho Diego para presentar a Elitim, que llega cedido por el Watford para esta temporada, aunque el Racing cuenta con una opción de compra al término del curso. El jugador está «encantado» con su estancia en Santander. Después de varias semanas de pretemporada y de haber disputado ya el primer amistoso veraniego ante la Cultural de Guarnizo sus sensaciones son muy buenas.

«Estoy contento con lo que intenta plasmar el míster. Me puedo desempeñar en cualquier parte del centro del campo y también estoy adaptándome a los nuevos compañeros, al nuevo sistema y a lo que quiere el Romo», ha señalado. Pero si algo le ha impresionado es el vestuario que se ha encontrado. Sus sensaciones fuera del campo son incluso mejores que en el terreno de juego. «Es un poco lo que se veía el año pasado. Este curso, con un gran bloque de jugadores que ya se conocen y tuvieron éxito, para los que llegamos las cosas son mucho más fáciles». El colombiano ha descubierto la 'piñuca' y cree que con ella el Racing es capaz de lograr cualquier cosa. «Es lo que se ve desde fuera, una piña un grupo de amigos, de jugadores jóvenes con hambre, con ambición que estamos aquí para cumplir los objetivo y para dejar la vida por el club».

Elitim es un jugón. Gasolina de alto octanaje para el motor del Racing. Y así lo demostró en El Pilar, durante el debut de pretemporada. Es cierto que la Cultural era un rival de inferior categoría que ni siquiera había entrenado para disputar el partido, pero el mediocentro se desenvolvió a placer dejando detalles de su calidad. El año pasado Guillermo Fernández Romo era fiel al 4-2-3-1 y Juergen está dispuesto a acomodarse a las directrices del madrileño, sin necesidad de que cambie el dibujo de la pizarra para que él se encuentre más cómodo sobre el campo.

«Me puedo adaptar a la posición que requiera Romo e intentaré aportar mi granito de arena en el once. Creo que por características de los distintos futbolistas tenemos una plantilla súper amplia e imagino que el grupo se acoplará», ha concedido. Lo cierto es que en Guarnizo el jugador se movió por delante del doble pivote, pero sí admitió que Romo le da «esa libertad para bajar, no solo a mí, también a mis compañeros, nos da libertad para asociarnos partiendo de las distintas movilidades e intentar ocupar espacios más que posiciones definidas. Y lo tratamos de poner en práctica. Creo que el equipo se ha ido adaptando a ello».

También ha dado cuenta de lo que Romo le ha pedido que haga hasta ahora, y parece que el técnico le insiste en que llegue al área para aprovechar su buen golpeo. «Me pide soltura, libertad, llegadas de segunda línea, intentar aportar más en cuanto a determinación y ese último tercio más allá de las asistencias, intentar aprovechar el golpeo y por qué no, sumar en el registro de los goles», ha confesado.

A pesar de su juventud, Elitim, de 24 años, cuenta con experiencia y 41 partidos en Segunda División a sus espaldas, por eso sabe muy bien qué es lo que necesita el Racing para asentarse en la categoría después de algunos pasos efímeros en los últimos años. «El día a día y el vivir el partido a partido marca el camino. No debemos volvernos locos, la categoría que te va marcando a medida de los resultados», argumenta el jugador, que cree que la configuración de la plantilla va a ser unas de las claves para conseguirlo. «Tenemos un equipo joven, pero que en su gran mayoría ya ha estado en Segunda y sabe lo que supone lo que es la competición. Sin duda ninguna este equipo y los jugadores somos capaces de lograr lo que nos propongamos».

Toda una declaración de intenciones del colombiano que echaba la vista atrás, al curso pasado, para buscar un espejo en el que, para él, el Racing debe mirarse también esta temporada. «Esa competitividad y ese hambre, esa ambición que mostró el equipo el año pasado, si seguimos con ese bloque y con esa mentalidad, seguro nos dará resultados y cumpliremos los objetivos que queremos».

A pesar de las pocas semanas de trabajo, Elitim es uno de los jugadores más en forma de la plantilla, aunque reconoce que todavía no están al nivel que le gustaría. «Es el tramo más difícil de la temporada, donde la carga física es bastante alta. El físico marca la diferencia y nosotros intentamos plasmar eso en el terreno de juego. Quizá ahora las piernas no irán todo lo bien que quisiéramos, pero es la base para poder sostener la temporada en sí». Por eso el jugador trabaja individualmente en el gimnasio con una sola idea en la cabeza: estar a la altura. «Ahora es tiempo para sumar, sumar minutos, sumar cargas, los entrenamientos de doble sesión y que esa parte física a la hora de la competición esté en un punto bastante alto».

El primer partido de pretemporada no solo ha dejado buenas sensaciones a Elitim. Mikel Martija también está satisfecho con el resultado, a pesar de que ahora llegan dos partidos más, el primero mañana ante el Sporting, que serán mucho más exigentes y una vara de medir más acorde para formarse una idea de en qué punto está el Racing. «Va bien, porque tenemos que ir acumulando tanto carga como sensación. Creo que salió todo según lo previsto», ha dicho el guipuzcoano que todavía quiere observar detenidamente al grupo porque «no deja de ser un equipo nuevo y tenemos unas aspiraciones nuevas».

Lo más positivo de todo para el director deportivo es que en estas primeras sesiones, «tanto lo que estamos sintiendo, como el amistoso, nos reafirman en que vamos en una buena línea, eso es lo importante». De lo que no ha soltado prenda Martija es del mercado de fichajes. Ni de jugadores en el punto de mira ni de cuantos refuerzos le quedan por hacer al equipo. «No lo sabemos, no lo sabe nadie. No es una cifra, no es un número. Lo bueno de esto es que gran parte de la plantilla ya la tenemos y estamos muy satisfechos de lo que hemos incorporado y cómo no estamos encontrando con ellos».

Eso sí, el perfil que quiere sí lo tiene claro. «Es un vestuario sano, de compañerismo, de que vamos todos a uno y eso en un temporada de esta exigencia seguro que nos va a ayudar. Entre semana hay que entrenar a muerte y el domingo hay que competir a muerte, que el equipo no va a dejar de luchar por ello», ha comentado, pero no quería avanzar qué demarcación es la que busca. «Me quiero centrar en ver cómo están los que ya estaban, los que han llegado, cómo van casando. Queda mes y medio, es mucho tiempo para dar una conclusión de lo que vamos a buscar. Creo que tenemos que buscar la mejora continua desde los que están y si tenemos que hacer incorporaciones que nos puedan ayudar de verdad».

A pesar de que ha preferido no dar detalles, el lateral izquierdo es una posición que, por falta de efectivos, sí es una prioridad. «Sí es una demarcación en la que por número y por perfiles sí podemos hacer. No os quiero confirmar algo que no tengo cerrado, pero si en estos días vemos una situación que es favorable y se puede concretar enseguida os lo haremos saber», ha detallado Martija.

Las dotes de negociación de Martija han conseguido encauzar el caso Yeray y recomponer la relación entre el canterano y el club, tanto que el jugador ya entrenó ayer con el readaptador físico del primer equipo. «Estamos muy satisfechos de haber renovado el contrato para ya dejar una relación bien establecida», ha comentado con tranquilidad. Y es que para el guipuzcoano se han cumplido los objetivos. «Hemos logrado entre todos algo que merecíamos las partes, que era renovar un contrato que se ajustase y se adaptase más al momento», ha relatado Martija, que habla de la necesidad de adaptar la relación a causa de la productividad que ha ofrecido el jugador.

«Los futbolistas van incrementando o reduciendo su rendimiento, tenemos que darle valor en su medida. Hay que tener cuidado con los chicos de casa porque son momentos que emocionalmente no son fáciles de gestionar», ha argumentado. Lo que el director deportivo no ha aclarado es si Yeray pasará a formar parte de la primera plantilla o de la del Rayo Cantabria. «Estamos en esa puesta a punto después de una inactividad tras el verano y vamos a ir viendo estos días qué es lo que vamos ajustando, sin determinarlo todavía, vamos a ir ajustándolo».