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La Federación Española de Fútbol insiste en que el partido correspondiente a la jornada 20 de Liga, entre el Amorebieta y el Racing, se ha de jugar este miércoles a las 17.00 horas. Por su parte, el equipo vizcaíno persiste en que no ... puede hacerlo puesto que este martes terminan el confinamiento siete de sus diez positivos –a falta de confirmar si tiene alguno más– y que hasta el próximo 4 de abril no sale el resto. La directiva del Amorebieta reitera que no está en condiciones de poder disputar el encuentro. Y mientras tanto, el Racing sigue de cerca como si fuera un espectador de un partido de tenis los golpes de unos y otros –Federación y Amorebieta– trabajando como si el partido se fuese a celebrar. A última hora del lunes, los responsables federativos señalaban que se estaban buscando nuevos contagios para determinar cuántos jugadores tiene disponibles el club vizcaíno, recordando la norma de que se pueden incluir en la lista hasta seis futbolistas del equipo inferior del club, en este caso del que milita en categoría regional.
Este martes están programadas unas pruebas PCR a los miembros de la plantilla para comprobar si los que eran positivos ya no lo son y si existen o no más futbolistas afectados. Existen varios escenarios posibles, pero la Federación, que es la soberana apura hasta el último momento para celebrar el partido y dar por concluida la fase regular del campeonato. Por eso este martes, tras los resultados de los test, deberá tomar la decisión final dado que no hay más margen. Si finalmente se juega, el Amorebieta tendría que hacerlo muy mermado, ya que prácticamente la mitad de su plantilla ha estado confinada desde el pasado 19 de marzo. El club vasco recurrió la decisión del juez de Competición que pospuso el partido al 31 de marzo –se había de jugar el 21, pero el letrado reiteró su postura–. La directiva del Amorebieta prepara la documentación para continuar con su intención de defender su decisión de no jugar el partido. Entre lo papeles que maneja destaca el del Servicio de Salud Vasco (Osakidetza), que le impone diez días de confinamiento no solo a los futbolistas que han dado positivo, sino a aquellas personas que han podido estar en contacto con ellas. Este escenario le deja sin mucha maniobra para jugar mañana, aunque la Federación espere a los resultados de hoy para analizar cuántos jugadores podrían ser incluidos en la lista junto a los del equipo regional.
Ahora bien, además de este escenario mencionado existe otro que ambos clubes han valorado, pero que no parece que el ente federativo haya visto como una prioridad. El Amorebieta le ha hecho llegar a la Federación su deseo de que aplique el reglamento dado que el caso es excepcional. Explícitamente se expone que no se puede dar comienzo a la segunda fase del campeonato sin haberse finalizado por completo la primera. Esta circunstancia obliga a dos situaciones. La primera, que se aplace el arranque de la fase, previsto para el próximo fin de semana. Y la segunda, que ante la imposibilidad material y temporal de disputarse el partido se apliquen los coeficientes correspondientes a añadir a su puntuación. Así las cosas, posponer el comienzo de la segunda fase para que el duelo entre Amorebieta y Racing pudiera encontrar acomodo supone un agravio importante, no solo para ambos clubes sino para todos los que dependen de ellos. El Amorebieta está incluido en el play off de ascenso y el Racing en el anillo que luchará por mantenerse en la Primera RFEF y los equipos que les acompañen quedarían a expensas de ellos. La Federación no contempla esta posibilidad.
La segunda, la aplicación de los coeficientes, es la solución que tanto el Racing como el Amorebieta respaldan, aunque oficialmente no se hayan manifestado al respecto. Alfredo Pérez, presidente del Racing, exponía este lunes a El Diario Montañés el desconocimiento de la situación. «La última noticia que tenemos es que este martes los jugadores del Amorebieta se van a someter a unas pruebas PCR y que tendrán los resultados el miércoles y que se jugará. Eso es lo que sabemos oficialmente, pero hay que esperar a ver cómo se desarrollan los hechos». En otras palabras: a expensas de la Federación.
«Entiendo perfectamente a los jugadores del Amorebieta», declaró Álvaro Cejudo el pasado viernes. Este lunes Riki, por su parte, señalaba que si él estuviera en la situación del conjunto vasco tampoco tendría claro su proceder. «No sabría qué hacer, la verdad». En el club vasco, en cambio, son más directos. «Esperamos que se resuelva de una vez. Nosotros no podemos jugar. Es que algunos futbolistas van a llegar al partido sin poder entrenar ni un día, sin salir de casa en los últimos diez días», explicaba Joseba Larrea, presidente del Amorebieta.
La aplicación de los coeficientes es una medida, que sin ser la más idónea ya que obligaría a acabar la Liga fuera del terreno de juego, sí parece la más sensata. Ninguno de los equipos se juega apenas nada, y ambos podrían perder más que ganar en el envite. En el caso del Racing, esa medida le supondría unos valores similares a un empate. Es decir, el Racing sumaría, para ser exactos, algo más de un punto a su casillero, el mismo con el que arrancará la segunda fase del campeonato.
Tal y como están las cosas, está claro que supondría un mejor colchón sumar los tres puntos en juego, pero el duelo ante los vizcaínos es un arma de doble filo. Mientras el Amorebieta no tiene nada en juego y de jugar lo haría con un equipo muy mermado y con jugadores que ni tan siquiera pertenecen a la plantilla, el Racing lo haría con sus futbolistas habituales. Una derrota, además de perder ese punto que sí le da los coeficientes, también le dejaría tocado anímicamente.
Ningún técnico del equipo santanderino lo reconoce públicamente, pero todos coinciden en que lo mejor es pensar ya en la fase siguiente en la que un traspié podría no ser un fracaso, si no el final de los finales.
El Racing, ademas de estar pendiente de si juega o no su partido de mañana ante el Amorebieta, mira de reojo al subgrupo B puesto que de los resultados que se den mañana en la última jornada saldrán los cuatro rivales de la siguiente fase. Los emparejamientos son: Osasuna B-Ejea; Club Haro Deportivo-S. D. Logroñés; CD Ebro-CD Izarra y SD Tarazona-UD Mutilvera. Actualmente, el Logroñés y el Ebro tienen asegurado su pase a la ronda, ya que con 26 y 25 puntos, respectivamente, pase lo que pase no perderán su condición de equipo del segundo anillo. Sin embargo, la otra plaza sí que está en juego entre Mutilvera (23), Osasuna B (21) y Tarazona (21). En cualquier caso, el Racing pasará a la miniliguilla con cierta ventaja con respecto a estos equipos que salgan del subgrupo B. Concretamente el colchón será equivalente a seis puntos, aunque obviamente los clubes de este subgrupo disputarán dos partidos más. Es decir, para pasarle, el mejor de todos ellos tiene que hacer seis puntos más.
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