Lago Junior
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Lago Junior
MARCO G. VIDART
santander.
Viernes, 4 de agosto 2023, 02:00
El clima del norte ya lo conocía. Pero tras ocho años en Mallorca y cuatro meses en Málaga, Lago Junior (Yamoussoukro, Costa de Marfil, 31 de diciembre de 1990) se está volviendo a adaptar. Al tiempo, a su nueva ciudad, a su nuevo equipo y ... a sus nuevos compañeros. Pero todo eso va más que bien. El vestuario del Racing se lo ha puesto muy fácil y una de las tres incorporaciones, por el momento, para el nuevo curso no ve el momento de que el sábado, día 12, ruede el balón en el primer partido de Liga frente al Eibar.
-¿Cómo van estas primeras semanas en Santander
-La adaptación es fácil. Es todo muy sencillo. El vestuario es muy sano, con gente muy humilde. Me han recibido con los brazos abiertos y a lo mínimo que necesito están dispuestos a ayudarme. Eso facilita la adaptación. Conocía a Cedric, a Parera y a Sangalli. Me habían hablado muy bien del club y es lo que me he encontrado.
-Eso en cuanto al vestuario. ¿Y lo de adaptarse al tiempo? Porque viene usted de Málaga...
-He estado en Eibar. Pero luego pasé ocho años en Mallorca y cuatro meses en Málaga. Así que es como volver a empezar. El primer día sorprende un poco que sea 10 de julio y empiece a llover. Pero me estoy adaptando. En Málaga pasé cuatro meses, pero en Mallorca... Allí en la pretemporada se entrenaba a las 7.30 de la mañana. A partir de las nueve no se podía entrenar. Hacía mucho calor. Prefiero entrenar con el tiempo de aquí.
-Estuvo esos cuatro meses en Málaga, un club que aspiraba al ascenso y terminó bajando a Primera RFEF...
-Fui en enero con un plan A y un plan B, porque te planteas qué es lo que puede pasar. Llegué cuando se estaba a cuatro puntos de la salvación. Intentamos darlo todo, pero no pudo ser. El partido clave fue precisamente contra el Racing. A partir de ahí se vio complicado.
-¿Se siente más presión en un club así, que persigue un ascenso y acaba descendiendo, un club con las dimensiones que ha tenido el Málaga?
-Creo que la presión es la misma en todas partes. Porque al final, si no se consigue el objetivo, los jugadores pierden su trabajo. Se habían hecho fichajes para subir y se estuvo todo el año en descenso. Recibimos amenazas... La gente estaba igual de nerviosa que nosotros. Pero nosotros éramos los que teníamos más presión. Porque el que pierde con eso es el futbolista. Tengo compañeros del Málaga que a día de hoy no tienen equipo.
-¿Cómo ve al Racing en esta pretemporada?
-Bien, aunque yo no valoro mucho las pretemporadas. Es un periodo para ponerse en forma, para no lesionarse y para entenderse con el grupo. Lo más importante es la Liga. Yo he estado en equipos que en pretemporada han ganado todo y luego, han tardado diez partidos del campeonato en ganar. Por ahora veo un buen grupo, una buena defensa... Nos estamos entendiendo muy bien, aunque nos tenemos que conocer más.
-En su presentación dijo que José Alberto le quería cerca del delantero. ¿Cómo se ve en su nueva demarcación?
-Al principio fue un poco raro. Pero es una posición que me gusta. Cerca del delantero, puedo caer a la banda. Es como un extremo derecho. El izquierdo está más cerca del pivote y yo, más cerca del delantero para la segunda jugada. Tengo bastante libertad. Me gusta. Estoy muy contento.
-En poco más de una semana comienza la Liga...
-Tengo muchas ganas de empezar. Porque nunca he jugado en los Campos de Sport. Y cuando he visto el estadio, me ha gustado. Me recordó a los campos ingleses, con la afición muy cerca de los jugadores. Tengo ganas de conocer a los aficionados y de estar en el campo.
-¿Le han explicado qué significa jugar en el Racing?
-Me lo explicó un compañero del Mallorca, Abdón Prats, que estuvo aquí. Me dijo que iba a estar muy contento. Y eso es lo que me ha traído aquí. Quería un equipo con una afición que estuviese cerca de los jugadores. Y al llegar he visto el escudo del Racing en coches, en bares... Me gusta.
-¿Ya le reconocen por la calle?
-Todavía no he salido mucho. Apenas a la peluquería, que está en el centro (risas). Mi familia, mi esposa y mi hija de cinco años, están fuera. Pero vienen en unos días. Eso ayudará a estar más tranquilo.
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