La increíble estadística del Racing en los minutos finales

El caso es que los rivales deberían tener en cuenta que los partidos ante el Racing no se deciden hasta los minutos finales. Ya lo han comprobado Tudelano, Badajoz, Real Unión, SDLogroñés, Zamora, Calahorra –con ayuda de su portero–, ySan Sebastián de los Reyes. Todos esos encuentros terminaron con los aficionados levantándose de un brinco de los asientos en un estallido de alegría, un grito asomando a sus labios y el balón besando el fondo de la red. Y con el Racing salvando los muebles y sumando tres más. En el primer partido de Liga los de Romo ya apuntaban maneras y en su estreno en los Campos de Sport ante el Tudelano un gol de Cedric en el minuto 87 ayudó a los verdiblancos a cosechar sus primeros tres puntos.

Hubo que esperar siete jornadas más para que Cedric llegase al rescate de nuevo en el minuto 85. Fue en el octavo partido de Liga, ante el Badajoz, con una diana de definición casi perfecta tras un pase de Soko precedido por la carrera digna de un maratoniano que se marcó el camerunés. Solo dos partidos después le tocó el turno a Jack Harper. El delantero no se ha prodigado mucho esta temporada, pero su aparición ante el Real Unión en el minuto 85 le valió al Racing tres puntos con el gol de la remontada después de haber fallado hasta un penalti. El único que le han pitado este curso a los cántabros, por cierto.

Ante la SD Logroñés fue Manu Justo quien se enfundó el traje de superhéroe y en el 87 marcó el único gol del partido. Fue durante la temporada de sequía de Cedric, que no se tradujo en aridez para los de Romo. La plantilla respondió y fueron otros quienes marcaron los goles hasta que el nigeriano regresó por la puerta grande con tres dianas ante la Cultural Leonesa y un doblete ante el Zamora, donde sumó el gol de la remontada en la 'zona Cesarini', la que se refiere a los últimos 10 minutos de los partidos. Pues Cedric lo cumplió a rajatabla con un tanto en el 91 y El Sardinero enardecido. También enloquecieron los racinguistas al filo del pitido final ante el Calahorra, cuando el portero de los riojanos, Iricíbar, tuvo un desliz que a los verdiblancos le supo a gloria. Un gol en propia puerta en el 85 de Jesús Álvarez que fue un regalo para el Racing.

Y el exponente más reciente de la efectividad de los de Romo en los minutos finales se dio el pasado viernes en Madrid ante el San Sebastián de los Reyes con un Cedric en estado de gracia que no perdonó a los madrileños en el minuto 89 y constató que los racinguistas tienen ya un corazón a prueba de bombas, acostumbrados como estaban hasta hace poco a vivir enganchados al desfibrilador.

Aunque estas siete jornadas no son las únicas en las que el Racing ha marcado casi sobre la bocina. Bobadilla también entró en el club 'Cesarini' con su gol en el 88 ante la CulturalLeonesa, aunque ese día el Racing ya se había dado un festín y el del defensa fue el cuarto de la tarde después de un 'hat trick' de Cedric. Ante el Zamora, pero en la primera vuelta, Harper perforó la red en el 90, aunque el del escocés no fue un gol decisivo. Tienza en el 47 y Manu Justo en el 56 ya habían dejado el partido sentenciado. Eso sí, el delantero puso la guinda. Y el propio Manu Justo hizo lo propio ante el Real Unión, también en el 90 tras los goles de Pablo Torre y Pol Moreno. En total: 4-1.

Últimamente al Racing le sale todo. 'La suerte del campeón', 'tener flor' se dice a veces en el mundo del fútbol, pero para Romo el secreto es otro, y es mucho más sencillo. «Debemos valorarnos; que seamos capaces de llegar a los últimos minutos con un nivel de concentración. Hay que tener la mentalidad necesaria en cada partido para adaptarse a cada momento. Entender en qué momento te puede llegar la jugada decisiva, si no te ha llegado aún», decía el técnico. Y la estadística del Racing le da la razón.