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Decía Guillermo Fernández Romo el viernes que «el respaldo de la afición no nos hace invencibles, pero sí imparables». Bueno, eso es algo que hay que demostrar sobre el campo, porque en el minuto 1 puedes ser una cosa y en el noventa, la contraria. ... El caso es que, a día de hoy, el Racing es invencible en su casa. Pero hoy recibe a un Real Unión que es imparable lejos de su estadio desde la jornada 6 del campeonato. O hay empate en los Campos de Sport o esta tarde alguno de los dos contendientes perderá su condición honorífica.
El equipo verdiblanco llega en su mejor momento de la temporada. Con la moral por las nubes. Las circunstancias son muy diferentes a las dos visitas anteriores de los irundarras. Ambas terminaron en ridículo espantoso. Eso no sucederá esta vez, pero Aitor Zulaika y los suyos saben por dónde transcurre la senda del triunfo en El Sardinero. El curso pasado, el míster vasco consoló a todos los presentes en la zona de prensa después de desnudar a un funesto rival y dejar a Aritz Solabarrieta con el cuello bajo la hoja de la guillotina.
Dos temporadas antes, el Real Unión cerró el campeonato venciendo en los Campos de Sport al paupérrimo Racing de Carlos Pouso, en una tarde que terminó con una bronca gorda. Zulaika no estaba en el banquillo blanquinegro, pero sí una semana antes, en el de la Real Sociedad B, que le hizo una caricatura a los cántabros y un tatuaje de un monigote en mitad de la frente.
Romo llega pulcro a este envite. Con el chaleco limpio para tomar la revancha racinguista frente al Real Unión y su míster. Aunque los fronterizos también tendrán ganas a los verdiblancos después de la remontada de la primera vuelta. Con Pablo Torre tocando a rebato en su salida al campo en el minuto 76, el Racing dio la vuelta al asunto para imponerse 1-2 en el Stadium Gal.
Al técnico madrileño le está funcionando la base de su equipo. Si ya es poco amigo de los cambios drásticos en el once, ahora que las cosas le van bien, menos modificaciones va a hacer. Eso sí, las circunstancias y las buenas actuaciones en las dos últimas citas han abierto el abanico de alternativas. Un cambio, eso sí, lo tendrá que llevar a cabo por obligación. Pablo Bobadilla no ha entrado en la convocatoria. Eso tiene un lado bueno para el míster, que no tendrá que decidir a quién coloca en el lateral derecho. Sin el riojano, el exultante Mantilla pasará al centro de la zaga y el recuperado Unai Medina se quedará con el carril.
En el doble pivote, con Fausto Tienza aún convaleciente de sus problemas musculares, todo apunta a que Íñigo Sainz-Maza, insustituible, estará acompañado por Borja Domínguez. Aunque la crisis en la relación del gallego con la afición -y el flojo rendimiento- le abre opciones a Sergio Marcos para ser el mediocentro ofensivo del equipo.
En el partido de ida, en Irún, Romo implementó su medular más conservadora, con Tienza e Íñigo en el doble pivote y Borja Domínguez en la mediapunta. Eso, en una semana en la que Pablo Torre tuvo concentración con la selección sub 19. Como ésta. Sin embargo, después de aquella remontada sobre la bocina y el toque de atención ante el Valladolid B, no parece probable que el técnico vaya a repetir experiencia. El de Soto de la Marina, a la mediapunta.
25 puntos de 33 ha sacado el Racing en los Campos de Sport, fruto de siete triunfos y cuatro empates en los once encuentros disputados.
9 partidos sin perder fuera de casa acumula el Real Unión. Su última derrota como visitante fue en la jornada 6 del campeonato.
Más dudas ofrecen las bandas. Marco Camus y Álvaro Bustos tienen una bonita pelea después de la buena segunda parte del asturiano en Salamanca. La competencia crece. Soko era el dueño del flanco diestro del ataque hasta la irrupción de un Arturo Molina que entra en todas las variables de la línea de tres cuartos. A día de hoy, parte por delante del camerunés.
Y en la delantera... Pues, a saber. El míster tiene dos opciones. O mete a un Manu Justo que, últimamente ha dado un rendimiento ligeramente mejor que sus compañeros de demarcación o le da una nueva oportunidad al llamado a ser nueve titular: Cedric. El viernes, en rueda de prensa, Romo tuvo palabras de cariño para el nigeriano. Sabe que recuperar su mejor versión es clave para el tramo decisivo de la temporada.
Hay un elemento más que no entra en las alineaciones, pero que sí influye sobre el terreno de juego. El Racing ha recuperado parte de la ilusión birlada a su afición. Hoy los Campos de Sport no lucirán una entrada de esas tristes. Esta vez habrá algo más de ambiente. Un buen punto de partida. Y si, como dice Guillermo Fernández Romo, el equipo cántabro con el apoyo de los suyos es «imparable», que lo sigan cuidando. Como hicieron en La Coruña. Como hicieron en Salamanca. Ganar hoy al Real Unión será sortear uno de los obstáculos más grandes que queda de aquí al final del campeonato. Donde espera, o no, el ascenso.
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