La lealtad racinguista cotiza al alza

No hay mejor comercial que el propio equipo, ya sea para vender ilusión, camisetas o entradas. Y eso al Racing esta temporada se le está dando de miedo. Tanto, que el club ya ha alcanzado la cifra de ingresos de venta por taquilla que se había marcado en verano, cuando realizó las estimaciones de la temporada. Ahora mismo el Racing cuenta ya con 1.5 millones con IVA por venta de entradas y ni siquiera ha terminado la campaña. Aún faltan tres partidos en casa, si se cuenta el de este sábado ante el Elche, que podría suponer un nuevo lleno. Si con los encuentros ante Mirandés yZaragoza se sigue la misma tónica, el club cree que se podría llegar a una cifra cercana a los dos millones.

En concreto, y si se diera el caso de que los verdiblancos se jugasen algo ante el Zaragoza, la previsión es que alcancen entre los 1.85 o 1.9 millones con IVA. Un dato más que bueno si se compara con anteriores temporadas. Por ejemplo, el curso pasado se cerró el año con 1.33 millones de recaudación en taquilla, con lo que si se alcanza la cifra de 1.85 se habría producido un aumento del 38.74%. «Es un dato muy bueno. Si se consiguiese estaríamos hablando de subir medio millón el porcentaje sobre 1,33. Es decir, subir alrededor de 517.000 euros, que es el casi el 40% de incremento», comentan desde el Racing.

Esto no es solo un indicador de éxito financiero, sino también un reflejo del apoyo inquebrantable y la lealtad de los racinguistas, que se convierte en ayuda en el campo y también en las arcas. Porque esa conexión emocional se traduce en este incremento orgánico en la economía del club y lo ayudará a mantener su competitividad cuando se calcule el limite salarial del próximo curso. «Todos los ingresos lo hacen. Los de taquillas, la tienda, que ha multiplicado por 'n' sus ingresos, la venta en publicidad... Cuentan todos los ingresos y los gastos, así que cuanto más ingreses mejor», explican desde el club.

El Racing ha demostrado fortaleza en el campo y también en las taquillas. Una cifra que refleja los ingresos generados por la venta de entradas y abonos entre los que se encuentran tanto los socios que asisten regularmente como quienes compran entradas de forma puntual. Pero es que la media de espectadores ha aumentado más que considerablemente.

Se ha pasado de una media de 12.090 a tener ahora mismo una de 15.014. Eso son casi 3.000 espectadores más por partido. «Teníamos confianza en hacer bien las cosas y que eso se notara, pero es que a falta de tres partidos ya hay 18.000 espectadores más de los que vinieron en el curso pasado durante todo el año», explican desde el Racing.

«Si se da una media de 18.000 en los tres partidos que restan en casa, esperamos alrededor de 50.000 espectadores más que el año pasado en las previsiones ahora mismo. Es mucho», matizan. Según datos del club, el curso pasado acudieron a El Sardinero un total de 254.232 espectadores en los 21 partidos de Liga y el estadio acogió una media de 12.106 aficionados. En este gran salto cuantitativo influye mucho la marcha del equipo. «Eso es mérito de la estabilidad del club, pero sobre todo del entrenador y los jugadores. Eso está claro. El equipo lo está haciendo muy bien», analizan en el Racing.

Los de José Alberto pueden lograr algo grande y eso arrastra a la gente. Una ilusión persigue a los racinguistas, pero ellos a quien siguen incondicionalmente es al Racing. «Lo de la afición está siendo increíble», decía el martes Íñigo Sainz-Maza. Y es verdad. Frente al Levante se colgó el cartel de 'No hay billetes' con 48 horas de antelación y los alicantinos trajeron a Santander 35 seguidores.

En el choque ante el Eldense se agotó el papel y no vino nadie del equipo rival. El Sardinero lleno de únicamente de racinguistas. Ante el Sporting también se vendió todo. Es verdad que 4.500 sportinguistas vinieron desde Gijón hasta Cantabria, pero no es menos cierto que en los últimos partidos el campo lucia sus mejores galas sin apenas aficionados rivales. Y es el que los racinguistas siempre están ahí, aunque llueva o sople sur.