Misión: batir al Andorra en la final de Campeones

Hace años la gente viajaba a Andorra para comprar más barato. Hacerse con algunos productos a mejor precio que en España ya que cuentan con algunas mercancías libres de impuestos. Perfumes, gafas de sol, material deportivo, bebidas e incluso tabaco han sido los más codiciados desde tiempos inmemoriales. Gerard Piqué también cruzó la frontera para sacar a pasear la tarjeta de crédito, pero el central del Barcelona se hizo con un club de fútbol, el FC Andorra. El equipo con el que se verá las caras el Racing el próximo viernes 3 de junio en Galicia en la final de campeones de Primera RFEF. Los andorranos son los campeones del Grupo II de la categoría y certificaron el ascenso a Segunda División la pasada jornada después de imponerse al UCAM Murcia (1-0) gracias a un gol de Carlos Martínez.

De momento el equipo que dirige Eder Sarabia, quien fuera ayudante de Quique Setién desde que el cántabro llegara al banquillo del Barcelona en enero de 2020 y lo abandonase en agosto de ese mismo año. Cuenta con 71 puntos, pero todavía puede sumar más. Al Andorra aún le queda una jornada por disputar, la que el Racing se ahorra al haberle emparejado el calendario con el extinto Extremadura. El equipo propiedad de Piqué tiene que jugar con el RB Linense antes de dar por finiquitada una temporada que le ha llevado hasta el fútbol profesional.

Aún así los verdiblancos cuentan con mejores números. Su casillero refleja ahora 79 puntos, 8 más de los que ha conseguido sumar el Andorra. Y en la siguiente jornada los de Romo acumularán 82, una cifra que los andorranos no podrán ya alcanzar aunque se impongan al Linense. En las 37 jornadas disputadas, los de Sarabia cuentan con un bagaje de 21 partidos ganados, 8 empatados y otros 8 perdidos, con 60 goles a favor y 35 encajados. La estadística no es mala, pero la del Racing vuelve a ser mejor. Los de Guillermo Fernández Romo cuentan con 24 encuentros ganados, que serán 25 después de la próxima jornada, 7 empatados y 6 perdidos. Unos guarismos que se deben en gran parte a la espectacular segunda vuelta de los cántabros, que llegaron a mantenerse 19 jornadas imbatidos.

Eso sí, si el Racing quiere ganar la final de campeones de Primera RFEF, convertirse en el equipo que estrene el palmarés de la recién creada categoría y traerse el trofeo a las poco pobladas vitrinas de los Campos de Sport tiene que ponerse las pilas. Meter una marcha más. Apretar. Mantener el hambre y la concentración para que el Andorra no tumbe el entramado defensivo de los verdiblancos de un soplido, como hizo el pasado sábado el Bilbao Athletic.

El extremo izquierdo Marc Fernández es un peligro para la meta de Parera. El catalán, que ha disputado 33 partidos y acumula 2.172 minutos, es el máximo goleador de su equipo con 11 tantos y tres asistencias. Pero Carlos Martínez no le anda a la zaga. El delantero ha marcado 10 goles en 28 partidos. Con lo que en la batalla de atacantes el Racing vuelve a ganar con los 14 goles de Cedric, seguidos de los 10 de Pablo Torre. Sobre el papel los verdiblancos tienen la batalla ganada, ahora les toca vencer la guerra sobre el campo.

En la cuestión económica y social las diferencias entre ambos equipos también son notables. El Racing contó esta temporada con algo más de dos millones de euros para buscar el ascenso y tiene 8.500 abonados. Una cifra mareante si se compara con los alrededor de 600 del Andorra, que tiene un presupuesto similar al que tuvo el curso pasado, de unos 1.5 millones de euros. Pero el relumbrón del equipo andorrano lo pone su dueño, Gerard Piqué.

El jugador se hizo con el equipo en diciembre de 2018 a través del Grupo Kosmos, que actualmente es el accionista mayoritario y ostenta el 56% del club, mientras que el 44% restante es propiedad de Clayton, una sociedad andorrana de los empresarios Higini Cierco y Francesc Destree. Y con el desembarco de Kosmos y Clayton llegó también cierta profesionalización del club y colaboradores como Gol Solidari, Estrella Damm, Anyós Park, Pyrenees Andorra o la entidad bancaria Morabanc, que firmó como patrocinador principal del club.

Pero con la llegada de Piqué llegó también la polémica, después de que el central de Barcelona comprase la plaza en Segunda B -la vacante que dejó el Reus- para su equipo sin llegar siquiera a jugar un partido en Tercera División. Como campeón de la Primera Regional catalana ascendió a Segunda B por la vía del talonario. Y las conversaciones que han salido a la luz en el último mes entre el presidente de la RFEF, Luis Rubiales, y el propio Piqué, han añadido más leña al fuego. «Si podéis evitar ponernos en el grupo con los catalanes mejor. Siempre son los de más nivel los 4 del grupo», decía el blaugrana interesándose por el reparto de grupos en la categoría. «Oído cocina», le respondía Rubiales, aunque lo cierto es que el Andorra sí acabó encuadrado junto a rivales catalanes.

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