Los buitres tendrán que esperar

Oltra desconfía del Numancia, como es obvio, pero en realidad del que no se fía del todo es de su equipo. Sabe que tiene dos caras; una, la que le permite ganar en Almería o tutear al mejor de la categoría, el Zaragoza. La otra, la que sin ningún miramiento le hace pasearse por el campo y no competir frente al Sporting. Descartada esta última versión, los verdiblancos jugarán hoy con la imagen del último día –ante el Zaragoza– como modelo a seguir. Con el mismo planeamiento, con la defensa de tres centrales que sorprendió a los maños, con los laterales bien abiertos y con esa política de ayudas y de líneas juntas que le hizo crecer. Oltra no le quiere dar pistas al Numancia, pero no tiene otra. Después de varios ensayos, el que más satisfecho le ha dejado al míster –y a los aficionados– es el que debe repetirse. La expedición partió ayer con los 18 futbolistas disponibles de la primera plantilla –incluido Manu Hernando– después de que entre sancionados, lesionados y cláusulas del miedo –Guillermo se quedará en casa por una imposición contractual– no tuviera ni que hacer descartes.

A Luca Zidane le volverá a custodiar una zaga con Manu Hernando, Figueras y Aitor Buñuel como centrales. Oltra le da otra oportunidad al navarro de formarse como zaguero. Pese a que le faltó frescura en la salida con el balón, Buñuel le dio un plus de velocidad en las marcas que al míster le dejó tranquilo. Lo de sacar la pelota controlada se lo dejará a Figueras y lo del puesto encubierto de libero a Manu Hernando, que cuando se libera de presión y se centra en contener cumple.

Ayer quiso despistar con el puesto de lateral derecho;Nando se estrenó el pasado fin de semana y hoy tendrá disponible a Carmona, pero el valenciano lo hizo tan bien y de sus botas salió lo mejor en ataque, que no puede sacarle del equipo. En el carril del zurdo regresa Moi Delgado tras la sanción de Abraham. No hay más.

No se prevén cambios en el centro del campo pese a que Toribio no dio una nota ante el Zaragoza. Sergio Ruiz aparece fijo y Mario Ortiz llama a la puerta. Será Oltra el que decida entre el santanderino o el catalán. Pese a las vueltas que le ha dado –eso ha admitido el entrenador–, Cejudo seguirá siendo, al menos de inicio, el mediapunta del equipo. Su polivalencia y estado de forma le ponen en la tesitura al técnico de combinarle para sacarle el mayor partido. No obstante, dada la necesidad de ganar que tiene el Racing, la decisión más sensata es la que contemple que el cordobés juegue lo más cerca del área rival posible.

La posición de Cejudo es la que marcará la tendencia del juego hoy en Los Pajaritos. Si se anima y se le ve acertado, el equipo le seguirá y pisará el campo rival con más asiduidad. Lombardo y Papu se jugarán el puesto de la banda que le queda a esa línea que se colocará por detrás del punta. Todo tiene su debate. Con Lombardo se consigue sorpresa y desequilibrio, pero bien es cierto que el francés lleva semanas sin destacar. Tampoco es que Papu esté en estado de gracia... En la delantera estará David Rodríguez en la enésima oportunidad de la temporada.

Y en frente, un rival que no está en racha, que ha bajado enteros en la segunda vuelta y que aunque suele proponer y llevar la iniciativa lleva jornadas en las que prefiere esperar. En su filas hay jugadores como Higinio, Curro, Moha... Gente con mucha experiencia, como Alberto Noguera, el exracinguista, y muchísimo peligro a balón parado. Solo cuatro equipos han encajado menos goles que los sorianos y como local, ninguno. Defiende muy bien, asume pocos riesgos, pero no está fino. Esto es lo que le da al Racing una opción.

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