Los números acallan el debate

Después de diez jornadas disputadas, el conjunto verdiblanco, con un balance de seis victorias, dos empates y dos derrotas, se encuentra posicionado exactamente donde se le exige: en la primera línea de la parrilla. Con veinte puntos, es colíder, junto a otros dos de los aspirantes -Deportivo y Unión Deportiva Logroñés- y con el sorprendente y aún invicto Unionistas. Aunque el club salmantino está pendiente de ver cómo se resuelve su posible alineación indebida en el choque de este domingo contra el DUX.

Y es que el Racing, en el campeonato liguero, lleva seis partidos sin perder en un tramo de la competición en el que, además, se ha enfrentado a dos de los principales favoritos a meterse en la parte alta de la clasificación, como son el Badajoz y el Deportivo. Uno mira hacia atrás y casi hasta le parece bueno el empate en Ferrol. Sin embargo, analizado en profundidad, no dejan de ser dos puntos perdidos por ni siquiera chutar a portería frente a un rival que jugó media hora con un futbolista menos.

Con ese expediente de cuatro triunfos y dos igualadas en el último segmento liguero, el Racing es el mejor equipo de los veinte que conforman el grupo I de Primera RFEF en seis encuentros. Son catorce, de 18 posibles, los puntos que han atropado los verdiblancos. Por detrás les sigue la Sociedad Deportiva Logroñés, con doce unidades; y Badajoz y Racing de Ferrol, con once, Un periodo en el que el Deportivo, que había vencido sus cuatro primeros compromisos, sólo ha sumado ocho puntos, una dinámica negativa que le ha llevado de nuevo a vivir entre el resto de mortales.

Además, después de sus dos derrotas en los dos primeros desplazamientos lejos de los Campos de Sport -Unión Deportiva Logroñés y Celta B-, el equipo de Guillermo Fernández Romo ha conseguido enderezar su rumbo y controlar esa agorafobia inicial. Tras el citado empate de A Malata, los dos siguientes viajes se han saldado con tres puntos en la maleta: Badajoz y Real Unión.

Hay un dato que parece clave en esta buena racha: dos goles encajados en estos seis partidos. Uno en Ferrol y otro en Irún. Ya ha reconocido en varias ocasiones el entrenador que su plan pasa por cimentar la parte trasera y, a partir de ahí, aprovechar las ocasiones disponibles, sean muchas, pocas o una sola. El único cambio visible, más allá del trabajo semanal, es la irrupción de Miquel Parera en la portería. El balear, tras cuatro partidos como titular en Liga, encajó su primer tanto el domingo en Gal. Este dato de goles encajados, como se podía esperar, convierte al Racing en el equipo menos goleado en este tramo de seis encuentro. Sólo el Racing de Ferrol, con tres, y el Celta B, con cuatro, se le acercan. Aún así, en el cómputo global, los verdiblancos no son los mejores en este capítulo, ya que el Deportivo ha recibido cinco dianas en las diez jornadas disputadas, por las seis de Racing y Badajoz.

Y, sí, en estos seis encuentros el cuadro cántabro ha sacado petróleo de su producción goleadora en el área rival. Casi sale a tanto por jornada. Son siete las balones enviados a las mallas rivales. No está entre los más realizadores en este periodo, pero ha logrado traducir esa efectividad en puntos. Los «aceleradores» racinguistas, que dice Romo.

El Racing tiene a su disposición un próximo tramo liguero -tres jornadas- a priori favorable, para mantener viva esta buena racha y, en consecuencia, seguir presente en los puestos altos de la clasificación. De momento, este próximo domingo visitará a una Cultural Leonesa que no pasa por su mejor momento. El equipo dirigido por Ramón González es undécimo en la tabla, con trece puntos. Con un dato curioso: es el más goleador y el más goleado del grupo, con 18 tantos en cada área. A 3,6 goles de media en sus encuentros. Un compromiso, el del domingo, en el que probablemente haya una gran presencia de aficionados verdiblancos en las gradas del Reino de León.

Una semana después, el viernes 12, a las 19.00 horas, visita los Campos de Sport un Bilbao Athletic que poco tiene que ver con el coco de temporadas anteriores. El Racing no conoce la derrota en su estadio y recibirá al decimoquinto clasificado, con diez puntos, uno sólo por encima de los puestos de descenso a Segunda RFEF.

Y el domingo 21 de noviembre, el conjunto dirigido por Guillermo Fernández Romo viajará a Zamora, donde se verá las caras con el penúltimo de la tabla. El cuadro rojiblanco cuenta con siete puntos en su casillero y ha perdido cuatro de los cinco encuentros que ha disputado en su estadio, el Ruta de la Plata.

Después de este tramo en el que el Racing parte como claro favorito para imponerse en los tres compromisos, ahí ya la competición volverá a subir la exigencia, con la visita de la auténtica revelación de la competición, el Unionistas, a los Campos de Sport de El Sardinero. Pero mientras tanto, si Romo y los suyos siguen haciendo los deberes en lo numérico, dejarán poco espacio para el debate. Como diría Agustín Díaz Yanes si hablase de fútbol, «nadie hablará de nuestro juego cuando hayamos ascendido».