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Peque observaba ayer, desde la ventana del gimnasio de las Instalaciones Nando Yosu de La Albericia, el entrenamiento de sus compañeros. No está lesionado. Sólo dolorido y bastante cansado. Pero mañana -14.00 horas- no estará frente al Mirandés tras ver la quinta cartulina ... amarilla, así que, de paso, el cuerpo técnico le dejó descansar. Control de cargas. Sobre la ausencia del máximo goleador verdiblanco pivotará el remodelado once que presente José Alberto frente al cuadro burgalés. Tendrá que buscar alternativa para la mediapunta y, además, suplir a los otros sancionados, titulares últimamente en ambos laterales de la defensa: Dani Fernández y Mario García.
Lo de estos dos últimos no tiene mucho misterio. Hombre por hombre. Tampoco tiene el entrenador racinguista mucho donde elegir. En la derecha, sólo dispone del reconvertido Marco Sangalli para la posición. Álvaro Mantilla, que ayer comenzó a trotar por el césped del Santi Gutiérrez Calle, sigue en la enfermería tras la tercera recaída de su lesión en el bíceps femoral de la pierna derecha. Así que a José Alberto sólo le queda la tercera opción -la de Juan Gutiérrez parece mucho más remota-, que en ocasiones incluso se ha convertido en la primera pese a no ser específica, porque el guipuzcoano ha dado un buen rendimiento en esa posición.
Precisamente Sangalli compareció ayer ante los medios. No entró en mucha profundidad cuando se le preguntó por su más que posible vuelta al lateral derecho: «Cómodo está cualquiera que entre en el once inicial. También está Juan. De aquí a final de temporada, más que pensar en la situación personal de cada uno, creo que es más importante pensar en lo colectivo, porque la concienciación como grupo es vital. Tenemos unas cuantas bajas esta jornada. La gente ha respondido; yo disfruto de lo que entrena el equipo durante todo el año en La Albericia y, si me toca jugar, intentaré hacerlo lo mejor posible para ayudar a que el Racing gane el partido».
Si los problemas físicos permiten a Íñigo Sainz-Maza ser titular, el míster podría repetir la propuesta elegida ante el Elche.
Con la idea de buscar un sustituto más parecido a Peque, está la opción de trasladar a Íñigo Vicente por detrás de Arana.
En la otra banda de la zaga racinguista, sin el sancionado Mario García, será su tocayo de apellido el que le sustituya. Saúl y Mario se han alternado en el once durante la temporada, aunque el segundo de ellos, el más joven, se ha hecho fuerte en la posición en los últimos meses. El de Vioño, que ya entró en el descanso frente al Elche para suplir a su compañero amonestado, tendrá una oportunidad para reivindicarse en este tramo final de la competición.
Sustituir al máximo goleador del equipo tiene más miga, aunque ya lo hizo José Alberto el pasado fin de semana contra el Elche. Pero no es lo mismo contar con él en la recámara que tenerle en la grada. La prueba está que, ante el cuadro ilicitano, el equipo mejoró cuando el catalán entró al descanso del encuentro. Hizo el segundo gol verdiblanco y tuvo opciones para haber anotado alguno más.
Así que el míster tendrá que darle vueltas al once. Hay dos opciones principales. O repetir con tres mediocentros, como sucedió contra el Elche, donde actuaron Iván Morante e Íñigo Sainz-Maza en el doble pivote, con Aritz Aldasoro, un poco más adelantado. Es posible, aunque el Mirandés tiene unas características muy diferentes, que pueden obligar al Racing a ser más protagonista con balón.
Poco a poco, los Campos de Sport van agotando sus entradas para el partido de mañana frente al Mirandés. Ayer se completaron Preferencia Este y Tribuna Central y al cierre de las taquillas del estadio verdiblanco aún quedaban disponibles algunas localidades sueltas de Tribuna Principal y bastantes en la zona Sur, especialmente en Preferencia. En total, 1.209 entradas a la venta, que se podrán seguir adquiriendo a través de la web del club y desde las 10.00 horas en la esquina sureste de los Campos de Sport. El cartel de 'no hay billetes' está cerca, pero de momento se resiste
Además, Íñigo Sainz-Maza continúa entre algodones. El Comité de Competición le levantó la cartulina roja que vio contra el Elche, pero sigue arrastrando los problemas físicos derivados de la rotura de fibras de grado II que sufrió hace unas semanas en el bíceps femoral de su pierna derecha. Ayer, apenas hizo un rondo junto a sus compañeros y, posteriormente, se ejercitó al margen. Entrará en la convocatoria, pero habrá que ver con qué rol. Si el de Ampuero no es titular, parece poco probable que el entrenador se decante por un trivote con Morante, Grenier y Aldasoro.
Y luego está la posibilidad de mover a Íñigo Vicente a la mediapunta. Tampoco es algo nuevo para el futbolista de Derio, que ha cuajado buenas actuaciones en esa posición donde su último pase también tiene una alta incidencia. Esta propuesta obligaría a buscar un extremo izquierdo. Algo que José Alberto podría cubrir trasladando a Lago Junior al flanco zurdo y abriendo la puerta del ataque derecho a Jordi Mboula. La posibilidad de que sea Ekain el que entre por detrás de Arana se antoja más lejana a día de hoy.
Puede que lo obligado no sea lo único que cambie en el once del Racing para recibir al Mirandés. En el centro de la zaga, Manu Hernando parece inamovible, pero la opción de que juegue Rubén Alves en lugar de Germán Sánchez siempre está en el aire. El andaluz cuajó un gran partido ante el Elche, pero los rápidos atacantes del equipo burgalés pueden propiciar el cambio.
Tampoco es descartable que, sin mover a Íñigo Vicente de su posición, Mboula pueda entrar como titular en el extremo derecho, en detrimento de Lago Junior, pese a que el costamarfileño tuvo una buena actuación, con gol incluido, frente al Elche. Sin embargo, José Alberto siempre ha mostrado cierta predilección por el catalán, que también vio puerta en la última victoria verdiblanca.
Así pues, poco se parecerá el once del Racing de mañana frente al Mirandés al que eligió el técnico asturiano para recibir al Elche. Tres cambios son obligados y es probable que haya alguno más. Y aunque haya bajas capitales, como la de Peque o la posible de Íñigo Sainz-Maza, la plantilla racinguista ha demostrado estar metida en la búsqueda del objetivo cuando ha habido que tirar de los menos habituales. A eso de las 13.00 horas de este sábado, José Alberto despejará todas las incógnitas. Como dice Sangalli, da igual los nombres, porque «lo importante es pensar en el colectivo». Una ilusión persigue al racinguismo y esta exige ganar.
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