Una oportunidad única para sumar

Los tres puntos que los verdiblancos pueden sumar hoy, o ni siquiera oler si no se hacen bien las cosas, pueden marcar la diferencia en la siguiente fase, la que arranca el miércoles 7 de abril y en la que el Racing debe asegurar su presencia en Primera RFEF la temporada que viene si no quiere protagonizar un descenso virtual de categoría. Pero eso el racinguismo no quiere ni pensarlo. Taquicardia y sudores fríos. Y es que el fútbol es una pasión poderosa y para un racinguista más. Los corazones verdiblancos, bastante maltratados en los últimos años a base de disgustos futbolísticos, rezan por no llevarse uno más.

El Racing se verá las caras con un Amorebieta que ya le ha ganado en dos ocasiones esta campaña: la primera en pretemporada (1-2) y la segunda en la primera vuelta (0-1). Si a la tercera va la vencida, esta tarde los de Solabarrieta tendrán la oportunidad de buscar revancha. Y a priori tienen todo de cara para sumar. No se puede obviar que el equipo vasco va a competir con lo justo. El equipo de Iñigo Vélez está muy mermado de efectivos tras el brote de coronavirus en el vestuario que ha terminado afectando a prácticamente la totalidad de jugadores y cuerpo técnico, y que seguramente condicionará lo que pueda suceder esta tarde. Al fin y al cabo van a competir durante 90 minutos después de diez días inactivos y Vélez tendrá a su disposición finalmente a doce integrantes de la plantilla azul, de los cuales tres son porteros, porque Mikel Álvaro e Irazabal, dos de los jugadores con los que sí podrá contar, están apercibidos, Así, Vélez va a tener que echar mano del segundo equipo, que está cuatro categorías por debajo de la Segunda B, e incluso del juvenil.

Si el Amorebieta es la cruz de la moneda el Racing es la cara. Solabarrieta recupera a Álvaro Bustos para este encuentro, ya totalmente recuperado de la lesión muscular que sufrió ante el Real Unión y que no le permitió estar en el campo ante el Arenas la pasada jornada. Además, también estará disponible Lars Gerson, que estaba concentrado con la selección de Luxemburgo y que llegó el miércoles a Santander después de enfrentarse a Portugal en un partido clasificatorio para el Mundial de Qatar. El defensa, aunque no saldrá de inicio previsiblemente, pasará de vérselas con Cristiano Ronaldo a lidiar con los delanteros del Amorebieta. Anacronismos del fútbol. Quienes se quedan fuera de la convocatoria son Martín Solar, Pablo Andrade y Marco Camus. Los dos primeros, por decisión técnica, y Camus porque aún no está recuperado de su lesión muscular de grado I- II en el semitendinoso de la pierna izquierda.

Pero Solabarrieta cuenta con todos los jugadores que conforman su 'once de gala'. Los nombres que se han convertido en una fórmula más o menos fiable para sacar los partidos adelante, y esos son los que estarán sobre el césped de Urritxe esta tarde. Es verdad que el técnico verdiblanco anunció esta semana que habría cambios respecto al once la anterior jornada, pero esas permutas bien pueden referirse a la entrada de nuevo de Bustos en el extremo izquierdo. En ausencia del asturiano ante al Arenas Traver ocupó su puesto y no con mucha fortuna. La otra novedad podría ser la presencia de Jon Ander de inicio en punta de lanza. El vitoriano conoce muy bien el campo del Amorebieta, que fue su casa durante una temporada, y de ahí precisamente se lo trajo el Racing. Además es posible que Solabarrieta busque fijar a los centrales del cuadro de Vélez, y Jon Ander desempeña mejor ese trabajo que Cedric.

La portería no ofrece dudas. Lucas Díaz estará bajo palos, y para custodiarlo Óscar Gil y Álvaro Mantilla en el centro de la zaga. El lateral derecho será para Diego Ceballos y el flanco izquierdo, históricamente desangelado en el Racing en los últimos años, ha encontrado en Isma López a su dueño natural. En la sala de máquinas, el tándem que forman Riki e Iñigo es el que mejores resultados ha dado hasta ahora. De hecho, de las botas del asturiano depende que el Racing sea capaz de generar fútbol. Cuando no tiene presencia en el juego el equipo se resiente y por ahora es el único capaz de dar vida al centro del campo, y sobre todo de conectar con Pablo Torre, que ejercerá de enganche. En los extremos, Soko por la derecha y Bustos por la izquierda desempeñarán el rol de puñales para tratar de hacer todo el daño posible en campo contrario. Y en punta de ataque, Jon Ander, que se las verá de nuevo con su exequipo. En su rueda de prensa Solabarrieta ya anunció que lo importante es «tener el balón». El entrenador vizcaíno comento que el Amorebieta «es un equipo que juega muy directo y sería un error intentar jugar como ellos», por lo que bajar el balón y manejarlo en campo será la prioridad del técnico.

El Amorebieta llega mermado y lo cierto es que la incógnita hasta saber si el partido se disputaría o no se ha mantenido prácticamente hasta el último momento. Incluso el equipo vasco llegó a pedir otro aplazamiento a la Federación proponiendo pasar al lunes el choque pendiente ante el Racing, y retrasar hasta el jueves el primer partido de la siguiente ronda. Entre la documentación que aportó para solicitarlo figuraba un calendario individualizado de las fechas de fin del confinamiento de cada uno de los jugadores, pautado por Osakidetza. Con él querían demostrar al ente federativo que no se encontrarían en condiciones mínimas de poder jugar hasta pasado el fin de semana. Finalmente, su petición cayó en saco roto. El balón rodará esta tarde.