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«Si nos fijamos en la dinámica que llevamos va a ser muy difícil volver a ganar», señaló este lunes Diego Ceballos al acabar el entrenamiento en La Albericia. El canterano fue el mejor con diferencia de su equipo ante el Amorebieta ... y fue también el que subió a la sala de prensa a dar la cara. Su rostro, el más amable del desastre que se perpetró en El Sardinero ante el modesto conjunto vizcaíno, fue el que se enfrentó a las preguntas que trataban de encontrar una explicación a tal deriva.
Ceballos, con la mirada al frente, tranquilizó como pudo al personal con cierta flema veterana. «El equipo se encuentra bien de estado de ánimo. Sabemos que no estuvimos bien, pero no hay tiempo para lamentarse porque este miércoles hay otra oportunidad y vamos con todo a sacar los tres puntos». El chaval no se amilanó y repitió que más le vale al equipo mirar lo que viene y dejar a un lado lo que ha pasado. Sin embargo desmenuzó un puñado de errores que el Racing cometió ante el Amorebieta y que le condenaron a la actual situación en la que se encuentra. «Nos faltó tener el balón, la circulación... No tuvimos presencia y lo más importante, que es finalizar las jugadas, apenas lo hicimos», indicó. Y habló con conocimiento de causa ya que tan solo se produjo un tiro a puerta en los noventa minutos de juego, el suyo. Una internada de Ceballos por la derecha acabó en un lanzamiento con la izquierda que detuvo Saizar, el portero del Amorebieta. Puede resultar increíble, pero fue el único bagaje ofensivo de todo su equipo. Ni más ni menos.
Ceballos insistió en que «nos faltó circulación de balón y llevar la pelota rápido de un lado a otro para llegar a situaciones de finalización y pegar a puerta». El discurso del lateral siempre fue el mismo. Al Racing le faltó proponer y llevar la iniciativa, una vez más, y el resultado fue el peor.
Su actuación fue un oasis en medio de la decepción. Sus internadas por la banda se quedaban en nada porque no tenía apoyos. «Faltaban líneas de pase porque tampoco había mucho movimiento a las espaldas de la defensa y por eso ellos estaban muy cómodo». No se pudo definir mejor el partido de su equipo. Nadie hizo un desmarque en ruptura; nadie rompió al espacio y a ningún compañero se le ocurrió tener iniciativa para sorprender a un Amorebieta que jugó el partido soñado.
El cántabro reconoció que «también al equipo le afecta que no salgan las cosas bien», pese que el estado de ánimo -insistía- «es bueno». Ceballos apuntó que «los resultados van a llegar porque trabajamos duro». El chaval recalcó que «debemos mejorar los errores. Lo hemos hablado y lo sabemos».
Señala el partido de este miércoles (a las 19.00 horas ante el real Unión, en los Campos de Sport) «como fundamental, ante la afición, en casa» para sacar los «tres puntos». Restó importancia a las críticas de los seguidores el pasado domingo. «No es agradable pero al final el publico tiene su propia opinión y debemos dar mucho más».
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