«La prioridad son los 1.700 trabajadores que el Grupo Pitma tiene en Cantabria»

-Por supuesto. Y que nadie lo tiene que dudar. El Racing es un proyecto en el que estamos dejando, además de mucho tiempo y ganas, mucho dinero de nuestro grupo, pero en este caso la prioridad absoluta es que cuando termine esta crisis todos nuestros empleados sigan trabajando con nosotros. Al final el Racing es una estructura y un proyecto imprescindible para Cantabria, pero dentro de esos niveles de cosas imprescindibles, entre el Racing y los 1.700 trabajadores que Pitma tiene en Cantabria, la prioridad son esas personas, por no decir las otras mil que tenemos fuera de Cantabria. Si me preguntas a qué le estoy dedicando más esfuerzo como Alfredo Pérez, te digo que estoy dejándome el 100% para el día después en Pitma, porque si el día después es bueno en Pitma podrá seguir ayudando al Racing. Si no lo es, no podrá seguir ayudando ni al Racing ni a nadie.

-¿Cuál es la situación del grupo en este contexto y con tanto ERTE en marcha?

-Es buena por dos razones. Tenemos el mejor equipo humano, que se puede tener, desde las capas directivas hasta la última persona del escalafón laboral, y eso nos permite hacer esfuerzos. Hemos tenido que incorporar expedientes de regulación temporal porque algunos de nuestros clientes y proveedores han cortado completamente su actividad. No te queda más remedio que tomar una decisión con esa gente que puedes tener de brazos cruzados en casa durante una semana, pero con la que después tienes que hacer algo, porque si no también les estarías provocando un mal a ellos mismos. Nuestro equipo humano está preparado para aguantar, en unos casos y preparar el día después, en otros. En segundo lugar, tenemos un suelo muy sólido. Estamos saneados y podemos apechugar con estas tormentas y salir de ellas. Como todos, contamos que este año 2020 nos vamos a dejar todas las plumas y que parte de los beneficios de años anteriores se tendrán que invertir en mantener el barco a flote, pero esperamos que el Grupo Pitma, como ha ocurrido en otras crisis que nos ha tocado vivir, salga fortalecido, porque entendemos que entramos mejor que otros y por eso esperamos salir de igual modo.

-Ya nos movemos en números de 2008, pero aquella crisis era estructural y esta coyuntural. ¿Cree que superada la emergencia sanitaria la recuperación económica será rápida?

-No sé si viviremos una crisis larga, pero lo que está claro es que es imposible recuperar toda la actividad con rapidez. Todas las empresas están dedicando sus recursos previstos para invertir en intentar mantener el empleo y las estructuras vivas para que cuando vuelva a moverse la economía puedan entrar en la rueda. Lógicamente, las inversiones de la Administración de las que nos podríamos beneficiar desaparecerán, porque se han centrado en la sanidad. Lo mismo ocurre con las de empresas públicas, que se deben dirigir a mantener el empleo, por lo que no va a ser fácil arrancar con rapidez. Yo preveo un arranque paulatino; progresivo, con actividades que se pongan en marcha poco a poco. Así nos lo están advirtiendo. No va a haber un día en el que de pronto todos podamos salir a la calle y volver a la vida normal. Será poco a poco, pero dentro de eso todos estamos empujando para que sea lo más rápidamente posible.

-¿Rápidamente son semanas, meses o años?

-Meses. En las modificaciones que ya estamos haciendo en los presupuestos del grupo, damos el ejercicio 2020 por amortizado. Ya no trabajamos en él, sino en el de 2021. 2020 lo vemos ya como un año de tránsito. Vamos a pasarlo lo mejor y más rápidamente posible y vamos a pensar en 2021, que entendemos que es cuando podremos recuperar la normalidad.

-Un 2021, por lo tanto, que no ve ya lastrado por esta crisis.

-Eso es. Yo creo que las medidas duras hay que tomarlas este año, aunque duela, para que en 2021 podamos estar a velocidad de crucero.

-¿Medidas duras? ¿Se refiere a despidos y expedientes?

-No; me refiero a inversiones que estuvieran previstas. En nuestro caso nos gusta afrontar aventuras empresariales y lanzar nuevos productos, pero todas las nuevas líneas de negocio están paradas para este año, porque hay que centrarse en lo esencial: mantener lo que tenemos al máximo posible. Todos esos proyectos están en nuestro espíritu, con lo que no van a desaparecer, pero los pondremos en marcha en el primer trimestre de 2021.

-Habla de mantener el empleo de los 1.700 trabajadores del Grupo Pitma ¿Eso es un deseo o una certeza?

-Una certeza. Estamos trabajando en eso. No se va a destruir empleo.