«El proyecto del Racing de José Alberto es sólido y debe seguir así»

-Acaba de denunciar por impago al Villarreal...

-No me ha quedado más remedio. Cuando decidieron echarme actuaron de una forma que me obligó a presentar una reclamación en el Juzgado. No quieren cumplir el compromiso firmado y estoy a espera de juicio. Han pasado dos meses, en la conciliación no ha habido avenencia y se presentó una demanda. El juicio saldrá en julio.

-La reacción del club ha sido pasar mediáticamente al ataque.

-Es el funcionamiento de muchos clubes que tratan no sólo de no pagarte, sino de desprestigiarte precisamente para justificar ese impago. No te queda otra que aceptarlo, porque hay muchos medios que publican estas patrañas sin preguntar ni tener información. Ni digo que sea gente controlada por el club, pero casi.

-Su caso no es único ¿Por qué ocurre con tanta frecuencia?

-Hablando con los entrenadores en la reunión del miércoles salieron un montón de situaciones similares a la mía. Hasta 2007 había una regulación por la que un entrenador no se podía sentar en el banquillo mientras no se presentara el finiquito del anterior.

-Hablando de reunión, ¿coincidió con José Alberto López?

-Sí. Ya tenía ganas de conocerle. Antes de marchar a Villarreal ya estuve viendo algunos partidos del Racing y ahora le he estado siguiendo, aunque no le haya podido ver muchos. Me cae bien. Me parece una persona sana, leal y sincera. Va de cara; es emocional y dice lo que piensa. Pero lo más importante no es eso, sino su idea de juego. Como siempre, compartirás unas cosas y otras no, pero me parece que hay una base suficientemente sólida para pensar en él a futuro y darle estabilidad al Racing, que no la ha tenido desde hace mucho.

-Vamos, que le gusta la puesta en escena del asturiano.

-Sí, sí. He visto al equipo y me parece que en líneas generales tiene una idea bastante clara, con los conceptos que a mí me gustan. Trata de jugar y tener iniciativa en los partidos. Luego la Segunda División es muy difícil y es él quien conoce las interioridades que le hacen tomar decisiones que igual no compartimos desde la grada o desde fuera. Pero siempre hay que pensar que lo hace por algo, porque es él quien está en el día a día. Hay muchas cosas que nosotros desconocemos, él conoce y le ayudan a tomar las decisiones.

-¿Quedarán para hablar de fútbol?

-Nos intercambiamos los teléfonos y seguro que quedaremos y charlaremos. A ver si puedo ver más al equipo para darle mi opinión como aficionado, porque ya le he dicho: siempre he sido del Racing y estoy muy pendiente de lo que le pasa. La verdad es que estoy contento. Me parece buen entrenador.

-¿Se puede pensar en algo grande a medio o largo plazo?

-Claro. Ahora mismo en Primera hay una serie de equipos que han conseguido mantener a sus entrenadores tres o cuatro años, o en casos como el Cholo mucho más, y se ha visto que esa estabilidad tiene una consecuencia clara y evidente en cuanto a rendimiento. La Real Sociedad, el Betis y el Atlético de Madrid están arriba permanentemente. Y hay otros equipos con proyectos a largo plazo como el Girona, que seguro que se va a quedar ahí durante los próximos años. Es importante que tratemos de aplicar esto a Santander y a la Segunda División, en la que hay muy poca paciencia y que no es una categoría fácil.

-¿Y la política deportiva?

-Tampoco conozco mucho a Mikel Martija; solo he hablado una vez con él, pero creo que está haciendo un buen trabajo. He visto al Racing crecer en estos últimos tiempos, desde la salida del anterior entrenador. Hay una estabilidad y una forma de jugar con la que los jugadores están rindiendo bien, con buenos registros. Eso es una base extraordinaria si tenemos en cuenta todo lo que hemos vivido anteriormente.

-Decía para pensar en Primera...

-Eso dependerá también de los recursos que tenga el club para crecer respecto a otros equipos de la categoría. Pero cuanto más tiempo se vaya consolidando esta apuesta, todo irá a mejor, y entonces sí que habrá de verdad un momento en que podamos luchar por ello. No sabría decir cuándo, porque esto no es fácil de determinar, pero, desde luego, necesitamos tiempo. Porque así estaremos más consolidados y mejor preparados el día en que demos el paso arriba. Y si pudiéramos acompañar todo esto con más gente de la cantera, mejor todavía, claro.

-El club tiene unos nuevos propietarios que han caído de pie. A Sebastián Ceria no le conocía, pero sí a Manolo Higuera ¿Qué impresión tiene?

-Han entrado en el club en una situación favorable en lo deportivo: el equipo va bien, dentro de lo que cabe. Aunque ahora haya perdido puntualmente una serie de partidos, está bien. El proyecto del Racing es sólido y debe seguir así. Lo importante es que ha entrado capital, alguien que de verdad tiene dinero y, sobre todo, que parece dar garantías de no ser un desalmado, como otros que hemos tenido aquí. Tengo menos confianza en Manolo Higuera, esa es la realidad, pero ojalá que las cosas le salgan bien. Les deseo toda la suerte.

-¿Pueden hacer mella en los ánimos, tanto del vestuario como del entorno, las tres derrotas consecutivas y la eliminación copera?

-No hay que preocuparse; estas rachas pasan siempre. Son etapas y si las vemos con un poco de calma se puede salir de ellas sin problema. Es verdad que el fútbol hace muchas veces regates inesperados, pero de la misma manera que has perdido tres partidos, también los puedes ganar. Las distancias no son muy grandes y esto es muy largo. Lo importante es no ponerse nerviosos y confiar en la gente que está trabajando y en lo que está haciendo. El fútbol no se puede controlar y, es más: los cambios, como hemos visto ahora en el Villarreal, por ejemplo, no son a veces para mejorar, sino que incluso empeoran las cosas.

-¿Por fin el Racing está creciendo?

-Creo que sí. Me fijo en lo económico, pero sobre todo en lo que veo en el campo. En la anterior etapa no veía que esto fuera a crecer porque la apuesta deportiva no invitaba. Sin embargo, ahora algunos partidos me han transmitido muchas cosas positivas. Es más fácil creer y avanzar con este estilo que con cualquier otro. No es que los otros no funcionen, pero si estás permanentemente cambiando, confundes a los futbolistas. Tenemos un montón de jugadores que están dando un gran rendimiento, porque este contexto les ayuda. Si viene otro entrenador que hace lo contrario, a ese futbolista le acabas perdiendo. Igual ganas a otro al que a lo mejor ahora no le vaya tan bien, pero creo que tenemos que pensar que a través de este estilo podemos avanzar más que de otra manera. Por lo menos, es mi forma de pensar.