Un punto de partida para Javi Rozada

El entrenador asturiano cuenta con las cuatro incorporaciones realizadas hasta ahora; los restos del naufragio en Segunda División y los chavales que tratarán de hacerse un hueco en la primera plantilla verdiblanca de cara a la competición. En total, 19 futbolistas a las órdenes del nuevo inquilino del banquillo verdiblanco.

La comisión deportiva racinguista ha comenzado a cimentar la plantilla desde atrás. De hecho, salvo sorpresa, la única línea que ya está cerrada es la portería. A día de hoy, el Racing cuenta con tres porteros, aunque uno de ellos está destinado a salir cedido. La renovación de Iván Crespo coloca al capitán como principal candidato a la titularidad, aunque las buenas actuaciones de Lucas Díaz en sus apariciones la temporada pasada y su pasado carbayón, como el del entrenador, le dan ciertos argumentos para discutirle el puesto al de Viveda. Quien no tendrá hueco será Jagoba Zárraga. El vasco regresa a Santander tras su fallida cesión al Rayo Majadahonda y, con dos temporadas más de contrato, los responsables del club consideran que lo mejor para él es otra salida a préstamo en la que pueda acumular los minutos que no ha tenido hasta ahora.

De las cuatro incorporaciones que ha hecho el Racing hasta el momento, dos de ellas son zagueros. De hecho, ambos comparten posición. El Racing ha cubierto su lateral izquierdo con las llegadas de Simón, procedente del Laredo, y del brasileño Pablo Andrade, que la pasada campaña jugó en el Rayo Majadahonda. El primero de ellos tendrá que convencer a los técnicos para ganarse un puesto entre los 22 elegidos.

Mientras tanto, el centro de la zaga se ve reforzado con el regreso de Óscar Gil, tras su cesión al Atlético Baleares. El navarro, surgido de la cantera del Athletic, seguro que no es ningún desconocido para Amorrortu. De momento, para esos puestos del eje de la defensa, Rozada podrá trabajar, además de con Gil, con Jordi Figueras, que tiene un año más de contrato; y con los canteranos Miguel Goñi y Juan Gutiérrez.

Los propios responsables deportivos del club explicaban en la rueda de prensa de presentación que las posiciones más cojas eran las bandas de la retaguardia. El fichaje de Pablo Andrade respondió a esa necesidad. Y en el flanco derecho, aún quedan cosas por hacer. El especialista en ese puesto, a día de hoy, es el canterano Íñigo Sainz-Maza. Además, Álvaro Mantilla, zaguero polivalente cedido la pasada campaña en el Laredo, podría comenzar también a entrenar con el primer equipo cuando arranque la pretemporada.

Precisamente Íñigo Sainz-Maza puede hacer labores en el doble pivote. Los mimbres de Rozada en la sala de máquinas por ahora son, aparte del citado Sainz-Maza, otro chaval de La Albericia: Martín Solar. Quizá, uno de los que más opciones tiene de quedarse en la primera plantilla. En un momento dado, ahí podría participar también un Álvaro Cejudo que, tras ser el futbolista más destacado de la desastrosa pasada temporada, continuará una campaña más en el equipo cántabro, a sus 36 años.

Y desde hace tan solo un par de días, el entrenador asturiano también cuenta con el hispano marroquí Ismael Benktib. El catalán llegó al club cántabro procedente del filial del Elche. El nuevo jugador del Racing no es un mediocentro defensivo puro. Su perfil se ajusta más al de un '8' y puede jugar de interior derecho o de mediocentro en caso de jugar con dos pivotes.

El Racing también ha apostado por otro canterano verdiblanco, aunque procedente de la Gimnástica, Saúl García. El extremo zurdo, a día de hoy, tendrá que pelear por el puesto junto a otro prometedor producto de La Albericia como Marco Camus y con el asturiano Álvaro Bustos, un fichaje que viene del Pontevedra. Y es que al ser las bandas de ataque posiciones de desequilibrio de los partidos, el club ha preferido no conformarse con la presencia de los dos chavales y ha incorporado a un futbolista más contrastado en la categoría.

En el otro flanco, en el diestro, después de que Nico Hidalgo rechazase la oferta de renovación del club, el Racing no cuenta a día de hoy con ningún futbolista específico más allá de un Álvaro Cejudo que, desde su llegada al conjunto verdiblanco, había desplazado su juego hacia la mediapunta. Sin embargo, la banda derecha fue toda la vida su hábitat. En esa parte, la comisión deportiva también tiene trabajo.

Si el fútbol se gana en las áreas, el Racing, por el momento, cuenta con dos delanteros en su plantilla. Eso sí, todo apunta a que tendrá que llegar alguno más, porque ya se sabe que el gol debe ser responsabilidad de algún jugador diferencial. Esta campaña se presenta como una nueva oportunidad para Jon Ander, después de que su grave lesión de rodilla cortase su progresión en su estreno en el fútbol profesional. Ya ha demostrado su capacidad en Segunda División B y puede ser un hombre importante. Y le acompañará un Javi Siverio que, tras su renovación, ya no volverá al filial. Es jugador del primer equipo a todos los efectos. El canario tendrá la ocasión de demostrar que la fructífera pólvora que ha puesto sobre el terreno de juego en Tercera División también tiene cabida una categoría más arriba.

Rozada tendrá que comenzar a trabajar con los mimbres que tiene disponibles, aunque probablemente la plantilla actual se parecerá más bien poco a la que inicie la competición, si el covid no lo impide. Mientras tanto, José Mari Amorrortu y Pedro Menéndez disponen de casi dos meses –hasta el 5 de octubre– para rastrear el mercado de fichajes y poner a disposición del técnico el mejor equipo posible con ese presupuesto de 1,5 millones que la propiedad del club ha estimado suficiente para buscar el ascenso.