Al Racing se le aleja Noguera y se fija en Daniel Ojeda

El Racing continúa pendiente de la Segunda División y del play off de ascenso a dicha categoría. La secretaría técnica cuenta con tres meses por delante hasta que comience la Liga, pero una vez que tiene casi compuesto al completo el cuerpo técnico del primer equipo -falta el segundo entrenador- no quiere perder tiempo. Uno de los primeros pasos que ha dado es sondear los equipos más atractivos para incorporar jugadores. De esta manera, los clubes que rozan el descenso en la División de plata son el primer nicho de mercado. El Racing ha seguido de cerca la plantilla del Lorca, matemáticamente descendido. Entre sus integrantes milita Alberto Noguera, un centrocampista ofensivo que llegó a debutar con el Atlético de Madrid en Primera División. El Racing se interesó por sus servicios hace unos días, pero el madrileño barajaba ofertas de varios clubes de Segunda División que se encontraban pendientes de certificar su permanencia, concretamente el Reus y el Alcorcón. La victoria de este último y la consecución finalmente del objetivo por parte de los catalanes aleja a Noguera de Santander.

El Lorca, dado su descenso a Segunda B y el profundo conocimiento de la secretaría técnica del Racing -en concreto de Chuti Molina- de los jugadores que componen su plantilla, aparece como uno de los primeros blancos desde El Sardinero. Del mismo modo, otro de los jugadores en los que el Racing ha puesto sus ojos es Daniel Ojeda, delantero de 23 años y que esta temporada ha jugado 30 partidos, con cinco goles en su casillero. El jugador fue uno de los artífices del ascenso la pasada campaña con el equipo murciano, pese a su juventud. Sus características encajan en las necesidades que busca el Racing, pero su edad y su trayectoria le convierten en un futbolista atractivo. Los verdiblancos aún no le han hecho llegar ninguna oferta, pero sí se han interesado por su situación.

Chuti Molina quiere aprovechar el tiempo del que dispone para ser el primero en llamar a la puerta de algunos futbolistas. Esa es su estrategia y de ahí que su principal escenario sean los equipos de Segunda de la zona baja y los filiales de equipos grandes. Sin embargo, el manchego deberá lidiar con unos recursos limitados, algo que ya conocía de antemano. Así las cosas, un jugador de Segunda División tiene de ficha mínima alrededor de 80.000 euros, cantidad que en Segunda B tan solo está al alcance de una docena de clubes privilegiados que domina presupuestos más altos. En el caso del Racing, un sueldo de esa magnitud sólo está reservado para el jugador franquicia que aún está por fichar.